Revista Psicología

On possessing a mind

Por Bernardo Pino Rojas

On possessing a mind
Estamos genéticamente pre-programados para que ciertas cosas ocurran en determinados momentos de nuestra vida. Una de ellas, por ejemplo, son los cambios físicos que experimentamos en la pubertad. Otra, según Chomsky, es la facultad del lenguaje.

Esto se constataría en el hecho de que el lenguaje humano no es el resultado de la enseñanza. Nuestros padres no nos enseñan el lenguaje, y es demasiado “pobre” el estímulo relevante que recibimos para sostener que el lenguaje humano es aprendido a partir de dicho estímulo.
El lenguaje surge en un período demasiado breve de nuestra vida como para darle todo el crédito a un posible proceso de enseñanza por parte de quienes nos crían. La idea que plantea Chomsky es la de entender el lenguaje como un órgano más, "un hecho biológico dado" que ocurre en algún momento determinado de la vida, tal como nos ocurre la muerte o cualquier otro.


Alguien podría hacer notar el caso de personas que nacen y se desarrollan prácticamente aisladas de toda comunidad humana (ej. niños/as salvajes, etc.), y no logran aprender ninguna de las lenguas naturales conocidas(como, por ejemplo, el Español o el Inglés). Sin embargo, de esos casos no se siguen que la facultad del lenguaje esté ausente. Más bien, esos casos podrían apoyar la hipótesis de que la verdadera naturaleza del lenguaje es o bien abstracta o bien algún tipo de proceso mental interno. De hecho, Chomsky piensa que el lenguaje es sólo un aspecto de nuestra mentalidad. Otros, como la música, podrían ser un signo del carácter multi-sistémico de la mente. En ese sentido, uno puede pensar que la distinción entre criaturas con y sin mente (vale decir,  con o sin mentalidad) no corresponde a algo que se puede mapear exactamente con respecto a la posible existencia de entre criaturas con y sin lenguaje. Según esto, es metafísicamente posible que haya seres que pueden poseer una mente incluso cuando carecen de lenguaje. 


No obstante lo anterior, hay razones para pensar que ciertas capacidades mentales (o, si se quiere, cognitivas) son plausiblemente explicables si se asumen procesos de transformación típicamente sintácticos. Por ejemplo, no parece haber alguien tenga la capacidad de pensar que “el pago de impuestos no es motivo para que las empresas de descuiden su responsabilidad social empresarial” y que, al mismo tiempo, carezca de la capacidad de pensar que “la responsabilidad social empresarial no es motivo para que las empresas descuiden el pago de impuestos”. Para usar un ejemplo más simple, no parece haber alguien que tenga la habilidad de pensar que “Pedro ama a María” pero que, al mismo tiempo, no tenga la habilidad de pensar que “María ama a Pedro”. De manera particularmente interesante, lo mismo parece ocurrir cuando se consideran el caso de las “actitudes proposicionales”, como deseos y creencias. No resulta muy convincente sostener que existe alguien que sea capaz de desear comer frutas en vez de chocolate, pero que, al mismo tiempo, sea incapaz de desear comer chocolates en vez de frutas. 


La ubicuidad de capacidades cognitivas como esta – que los filósofos normalmente denominan ‘sistematicidad’ – es lo que ha permitido plantear la hipótesis de que el pensamiento tiene la forma de un lenguaje, y de que, entre otras cosas, el significado de las palabras de algún lenguaje natural se deriva del significado de los conceptos que tales palabras expresan. Eso requiere hacer una distinción entre ítmes léxicos que constituyen las oraciones de un lenguaje natural, y los conceptos que constituyen un posible lenguaje del pensamiento. Con respecto a la naturaleza de estos últimos, Chomsky piensa que se trata de constructos internos independientes del mundo externo, cuyo significado está determinado por las relaciones que se establecen entre ellos y sus pares. En este sentido, la manera en que categorizamos los objetos del mundo depende de las estructuras internas que imponemos sobre la realdad, y no al revés. Quizás, esto se deba a que su mayor interés es dar cuenta de las reglas de una sintaxis basada en reglas generativas que pueda estar, finalmente, codificada en nuestro genoma. 


Otra posibilidad es que dicha sintaxis esté determinada por el carácter liguliforme general del pensamiento, cuyos elementos fundamentales corresponden a conceptos que pueden ser o bien estructurados (i.e. complejos) o bien no estructurados (i.e. atómicos). Si los conceptos fuesen átomos, entonces no resulta implausible pensar que tales átomos constituyen un vocabulario mental innato, a partir de lo cual se pueden teorizar una posible explicación para propiedades como la sistematicidad y la composicionalidad del pensamiento. Este último término hace referencia al hecho de que los pensamientos se formen en función de sus conceptos constituyentes, lo que, a su vez, proporcionaría una explicación no sólo para la sistematicidad del pensamiento, sino que también para ‘productividad’ del pensamiento en tanto propiedad de formar un número ilimitado de pensamientos a partir de un conjunto finito de conceptos y reglas de combinación. 


Personalmente, creo que la visión Chomskiana de la sintaxis interna no es incompatible con una visión atomista de los conceptos, siempre que se considere plausible la posibilidad de que es la realidad la que determina el vocabulario del pensamiento y no al revés. Queda abierta, eso sí, la pregunta acerca de cuán exhaustivo es el carácter lingüiforme del pensamiento para dar cuenta del fenómeno de la mentalidad. Algunas preguntas relevantes son: ¿Existe la posibilidad de poseer una mente sin poseer un lenguaje del pensamiento? ¿Cuáles son las condiciones necesarias para que algo sea considerado un agente con vida mental genuina? ¿Si la mente es multi-sistémica, hay maneras adecuadas de estudiar aquello para lo que una hipótesis del lenguaje del pensamiento no es relevante? ¿Cuál es el nivel ontológico y la unidad de análisis de cada uno de los “órganos” que constituyen una mente? ¿Qué forma tiene el pensamiento si no es la de un lenguaje? Etc.
http://urbanguyb.blogspot.com/

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