Once vidas tiene como protagonista a al DJ radiofónicoXavier Ireland, quien por las noches regala sabias palabras a londinensesinsomnes y que por el día es un ser solitario cuyo único amigo es el locutorque le acompaña en su programa, bien intencionado pero sin sentido del humor ytartamudo.
Un día, un acto inconsecuente de Xavier desencadenará unaserie de acontecimientos que transformarán la vida de once personas que nadatienen que ver con él. Y hasta es posible que en el camino, Xavier acabeencontrando lo que no sabía que andaba buscando…
- Once vidas
- Mark Watson
- Título original: Eleven
- Editorial: Roca Editorial / Octubre 2011
- ISBN: 978-84-9918-280-3
- Género: Narrativa
Resulta difícil resumir Once vidas.Xavier Ireland dirige un programa radiofóniconocturno junto a su amigo Murray, patoso y tartamudo. De noche Xavier escucha asus oyentes, casi todos insomnes solitarios, y regala consuelo. De día es unhombre solitario que huye de cualquier compromiso, por muy insignificante quesea. Su máxima es que ayudes o no a las personas, lo que tenga que pasar,pasará. Una mañana es testigo de un hecho y decide no intervenir, lo que provocaráuna serie de acontecimientos y emociones con “efecto domino”, alterando la vidade personas que nunca se han conocido. Once vidas es lo que llaman una novelacoral, con una multitud de personajes anodinos en su día a día, cuyasvidas interfieren en otras y éstas afectan a su vez a otras, dejando claro que elmás mínimo detalle, cualquier decisión, por muy insignificante que sea, acarreaconsecuencias. Por eso mismo la lectura de la novela nos lleva de un lado aotro, de un personaje a otro. Este batiburrillo de personajes puede despistarporque llega un momento en el que uno se pierde. Al menos yo me perdía entretantos detalles y pequeños acontecimientos. Y por si no fuera suficiente elmomento, el autor se “pierde” dando datos del futuro de algunos de esoprotagonistas fugaces, añadiendo una visión futurista que no aporta nada denada a los sucesos del libro.Lo que si plasma muy bien es laindiferencia y la soledad de las grandes ciudades, como nos convierte en seres anónimos.Todas estas vidas interfieren unas con otras pero lo que llama la atención esla superficialidad, como si todos temieran destapar su vulnerabilidad con laconfianza. La gente puede poner un nombre a un rostro, compartir una afición, otrabajar juntos, pero no sabe nada de sus compañeros, vecinos o incluso los quese llaman amigos. Sin embargo, Xavier ha encontrado lo que necesita en eseanonimato y fomenta esa soledad porque precisa olvidar su pasado, noinvolucrarse en la vida de nadie. Ha dejado atrás a su familia, sus amigos dela infancia y un recuerdo muy doloroso en Australia. Se ha adaptado a la fría ysolitaria Londres, porque se siente así de frío e indiferente.Desde luego no esperéis encontraruna comedia, como cabría esperar con la portada, todas estas vidas tienen supropio drama, ya sea grande o pequeño. Algunos personajes son más atípicos,provocando una sonrisa (más bien escasa), como Pipa, pero lo que predomina esla tristeza, la soledad y la lucha por salir adelante, incluso el desaliento. No puedo decir que no me haya gustado,pero no me ha aportado gran cosa porque me daba la sensación de dar muchasvueltas para nada. Por querer abarcar tanto, todo queda en la superficie en la mayoríade los casos, sin llegar a conocer verdaderamente a los personajes. Losacontecimientos que conducen la novela al final tampoco me entusiasmaron mucho.En una palabra, la describiría como decepcionantepor querer abarcar demasiado y acabar la novela con más preguntas querespuestas.Para mí, Once vida pasará al olvidoen cuanto abra otro libro.