Onceavo presente para mis lectores: Matarife o Matachín (I)

Con la llegada del mes de diciembre, marcado por el Puente de la Inmaculada, se intensifica el periodo de matanzas, que se prolonga hasta el mes de enero. Os dejo el texto que elaboré sobre el oficio de “matarife” o “matachín”, tras acudir a una matanza familiar en la localidad segoviana de Hontoria, a escasos kilómetros de la capital, y que compartí con los Cabrera en diciembre de 1996. La primera parte del artículo la titulé En diciembre, cuchillos en mano y matanza para todo el año, y narré, incluyendo numerosos vocablos y jerga utilizada por los componentes de esta familia, los preparativos que supone un “evento” como la matanza, que agrupa a un sinfín de familiares, vecinos e invitados de excepción.

Aunque la matanza se prolonga durante dos jornadas -normalmente en fin de semana-, el primer día concluye con la cuelga del animal abierto en canal para que la carne se oree, durante la noche, a fin de destazarle al día siguente. Aquí os dejo el enlace al artículo. ¡Que disfruteis!, puesto que este año ya he probado los chicharrones recién hechos de la matanza que ha tenido lugar en casa de la familia Escudero, a pricipios del mes de diciembre de 2013 en  Losana de Pirón (en plena sierra segoviana). Desde 1996 hasta 2013 han transcurrido 17 años, pero la matanza se mantiene familiarmente en el entorno rural y de forma festiva en el ámbito urbano -como las matanzas celebradas en el barrio de San Lorenzo o en La Lastrilla- y por lo tanto, el oficio de matarife, perdura.