Revista Salud y Bienestar
¡Hoy es EL día!¡Hoy sí que sí, empiezo!¿Os suenan familiares estas frases? Cada año, más o menos por estas fechas, son muchas las personas que deciden cambiar drásticamente, ¡YA! En este mismo momento, necesitamos para ayer lo que no se ha trabajado nunca.Y es que, en este día a día tan frenético, se nos contagian las prisas para todo, nada o casi nada se toma con tranquilidad, con calma; las decisiones son cada vez más rápidas porque la situación lo requiere, por capricho, porque sí, tenemos todo al alcance de la mano y es raro no poder solucionar las cosas del día a día con una llamada o una búsqueda en internet, todo en menos de 5 minutos se puede solucionar.Todo esto está muy bien, pero a veces como dice el dicho, las prisas no son buenas, y al final si por esto algo falla… ¿quién tiene la culpa?, ¿quién es el responsable del fallo? ¿Internet? ¿La persona que está al otro lado del teléfono? Todo influye, por supuesto, pero es más fácil ver el fallo en lo ajeno que en nuestro propio hacer, RESPONSABILIDADes la palabra.¿Qué tiene que ver todo esto con la nutrición? Mucho. Posiblemente es uno de los temas que se tratan con menos responsabilidad en nuestro día a día. ¿Me equivoco?“La dieta no funciona”, “El trabajo no me deja tiempo para comer bien”, “Salgo y ¿cómo voy a pedir agua para beber?”, “Si no como X (cualquier comida basura o ultraprocesado vale en esta frase) me miran mal, soy el raro/a”, “De toda la vida se ha hechoy no ha pasado nada...”Seguro que estas frases suenan poco, nadie las ha utilizado nunca (modo ironía ON). Lo curioso es que rara vez pensamos en nosotros, en nuestra salud, en darle la vuelta a esas frases y tomarlas como retos, porque cada vez que oigo estas frases sólo pienso en una palabra “EXCUSAS”, y sí, hasta cuando me las he planteado yo misma esta palabra casi sale gritando de mi mente, porque lo son, son formas de plantearnos las cosas echando balones fuera, la culpa siempre la tiene las circunstancias, otras personas, la vida misma, pero nunca nosotros.La vida es un RETO, con mayúsculas, porque hoy no es fácil intentar pensar en cuidarnos, en alimentarnos bien y con calidad en lo que comemos y vivimos. No es fácil, al principio, porque hay muchos factores que son obstáculos a superar, empezando por nosotros, nuestro entorno, y acabando por la sociedad en general; requiere remar muchas veces a contracorriente, responsabilizarnos de cosas, acciones y decisiones que de primeras no estamos dispuestos a asumir.Buscamos siempre el momento perfecto, la vida tiene que ser más fácil para hacer el cambio, para mejorar nuestra salud y calidad de vida. Pero si esperamos a que la vida se adapte a nosotros, a que se creen las condiciones ideales para hacer un cambio, desde ya os digo que jamás se producirá ese cambio, siempre hay una excusa, probablemente vivir no es tan difícil, pero sí lo sonlas situaciones que mentalmente nos planteamos, porque cómo enfrentamos las cosas, con qué mentalidad tomamos decisiones SI nos van a facilitar o complicar la existencia.En definitiva, RESPONSABILIDAD y SER CONSECUENTES,si no quiero hacer un cambio en mi vida, no lo hago y soy responsable de ello, acepto las consecuencias, ya llegará el momento en el que esté preparado/a para hacerlo, pero desde luego la culpa no la tiene el trabajo, la familia o los eventos familiares. Soy yo, valoro mis circunstancias y tomo decisiones consecuentes. PUNTO.¿Nos cuentas en qué eres responsable y consecuente?Realizado por Tamara Valencia Dueñas