Hace una semana coincidí en una boda con una ex-compañera de trabajo, Itziar, que me soltó una bomba que yo no me esperaba: Se había operado el pecho nueve meses antes. Me quedé sin habla, al principio pensaba que era una broma porque yo siempre la había visto estupenda, mucho más desde que adelgazó unos kilos hace ya un tiempo.
Su experiencia me pareció muy interesante y por ello le pedí que nos la contara en LMDM.
"Operarme el Pecho es lo Mejor que he Hecho en Toda Mi Vida" (Itziar García, 32 años, publicitaria.)
"Operarme el pecho es algo que siempre me había rondado por la cabeza porque nunca había tenido un pecho bonito; pero tampoco era nada dramático, así que no era algo prioritario en mi vida. Tras unos años de descontrol con la comida en los que cogí mucho peso, decidí que ya estaba bien, que no podía seguir así y que tenía que bajar peso. Así que me puse firme y bajé 22 kilos, que son muchos... Me veía estupenda, pero una de las inevitables consecuencias fue que el pecho se me resintió una barbaridad. Siempre lo había tenido algo caído, pero la pérdida de tanto peso hizo que se me quedase feísimo, completamente vacío ¡como si hubiese dado de mamar a cinco criaturas! Verme tan bien en todo lo demás hacía que el contraste fuera aún mayor así que tomé la decisión de operarme." ¿Cómo fue el Proceso de Búsqueda de Cirujano?
"El proceso fue rapidísimo. Una vez que tomé la decisión empecé a consultar con conocidos, pidiendo recomendaciones de cirujanos e informándome en internet. En una semana ya tenía cita con tres para una primera consulta. El primero al que fuí, el Dr. Alfredo Fernandez Blanco, del que me habían hablado muy bien, me causó buenísima impresión; me dió mucha confianza y tranquilidad y no lo dudé. Lo que más tranquilidad me dió es que está especializado en reparación y en arreglar errores de otros cirujanos, cosa que me dió muchísima seguridad. Soy una persona bastante impulsiva y como me dió tan buen feeling, directamente decidí hacérmelo con él. ¡La mejor decisión que he tomado en mi vida! Desde el primer momento entendió que quería algo súper natural, que no se notase que estaba operada. Y sobre todo, que más que tener mucho pecho, lo que quería era que estuvieran bien puestas.
Por lo caído que lo tenía y por la flacidez de la piel tuve que hacerme una pexia con prótesis. La pexia consiste en la elevación y reparación del pecho muy caído. Y las prótesis, obvio, para rellenar el vacío que se me había quedado con la pérdida de peso.
Me recomendó la colocación de la prótesis submuscular porque el resultado es muchísimo más natural. Yo por suspuesto estaba encantada porque era lo que quería, pero me avisó de que el postoperatorio era bastante más doloroso.
Estaba un poco asustada con eso del dolor, que no lo llevo nada bien, pero merecía la pena."
¿En qué Consistió tu Intervención? ¿Sufriste mucho con el Postoperatorio?
"¡Y el día llegó! Apenas un mes despues de tomar la decisión de operarme, entraba en el quirófano. La operación fue con anestesia general e ingreso hospitalario de una noche.
Aproveché la festividad del día de la publicidad para operarme, así que ingresé un viernes, ¡y el mismo martes ya estaba trabajando!
Fue increíblemente bien, pasé un postoperatorio buenísimo, con apenas dolores.
Tenía movilidad reducida (no podía levantar mucho los brazos porque tenía como unas agujetas brutales, consecuencia de romper el musculo para meter la prótesis por debajo), pero yo fui la primera sorprendida de estar tan bien. Era prácticamente autosuficiente desde el día uno.
Y en una semana, quitando que no podía cargar peso, estaba como nueva. Tengo que decir que creo que tuve mucha suerte, porque por lo que me había informado me lo habían puesto fatal."
¿Qué ha Supuesto para ti la Operación? ¿Ha merecido la pena?
"Han pasado 9 meses desde que me operé y tengo que decir que es lo mejor que he hecho en mi vida.
No solo por la parte estética, sino más por la parte emocional. ¡La autoestima la tengo por las nubes! Cuando me miro al espejo estoy feliz, cosa que antes no pasaba... Ahora tengo mucha más seguridad en mí misma, estoy mucho más feliz con mi cuerpo y no tengo complejos. Hasta he hecho topless este verano, cosa que antes habría sido completamente impensable.