Opinión: 'Apuntes sobre Pamplona'

Apuntes sobre Pamplona

Estimados lectores:

No soy el más preparado ni el más indicado para dar una opinión con fundamento y contrastada experiencia sobre lo acontecido en Pamplona pero intentaré dar mi humilde y sencillo punto de vista que, como es natural, tendrá quienes lo compartan y quienes no.

Estoy asistiendo de un tiempo a esta parte al emponzoñamiento y degradación más absoluta de lo que es la Fiesta y del respeto que hay que tener al toro bravo en su más alta acepción. Contemplé estos días con gran estupor como unos cuantos tienen el poder para cambiarlo todo sin respetar a nada ni a nadie. Hasta el pasado fin de semana con la corrida de Miura sabía que Pamplona no me decepcionaría ni un ápice en las expectativas sembradas. Rotunda corrida de Dolores Aguirre, bien presentada y encastada la de Torrestrella pero ¡ay amigo!cuando llegaron las figuras de pitiminí todo se tornó en burla, en escarnio, exceptuando la bien presentada corrida de Ricardo Gallardo. Pero claro, ahí las figuras ni estaban ni se les esperaba y como era de suponer vino don Roberto con el amigo de los gatos, es decir, Juli el pegapases, el que abrió la puerta grande de Pamplona (otrora Meca de la integridad y seriedad en el toreo) con un toreo vulgar, sin exponer ni un alamar y con unos toros de Victoriano del Río que para nada parecían hacer honor a la grandeza de su hierro. He leído por ahí que algún que otro perrito que saltó a la arena de Pamplona fue rechazado en la Beneficencia de Madrid ¿Hasta qué punto llega la desvergüenza?¿Por qué nos toman por tontos a los aficionados? Es que claro, se pensarán que entre borrachera, comilona, fiesta y charanga no hay nadie allí lúcido que se de cuenta de lo que ocurre. Ya se sabe que cuando anda la zorra en el gallinero....mal acaba la cosa.

No quedando ahí la cosa vivimos otra jornada de escarnio y de infausto recuerdo con aquél que antes era un diestro contundente de mano izquierda y que sabía imponerse a los toros como era el Cid. ¡Ay el de Salteras! Ya una vez le recomendé una banda de música que hay en su pueblo natal de gran calidad por si quería coger la trompeta, la flauta o la corneta y hoy se lo vuelvo a recordar. ¿Qué narices hacía dando mantazos a diestro y siniestro y dejándose coger como si fuese un novillero de escuela? Estos figuras pegapases están decididos a triturar la bravura y la casta a cambio del animalito bobalicón y de carretón y lo que es peor obviando la suerte de varas que tengo entendido que debe ser fundamental en una lidia. Me resisto a hacerlo pero llegará un día en que me haga “fandilista” como el director de este blog.

No contentos con todo este cúmulo de despropósitos que ayer, por ser la última, don Roberto volvió a meter la mano en el corral (lástima que no se la arrancaran) para sacar a la arena otra colección de inválidos que por su propia condición mular tendían a tirarse a la arena desfondados por el esfuerzo. ¿Dónde está la bravura que tanto jaleaba usted a bombo y platillo sr. Benjumea en la conferencia que nos propinó en Málaga?¿Cómo tuvo la desfachatez de decir que sus toros van igualmente presentados a Málaga o Sevilla que a Pamplona?¿Usted cree que somos lerdos, imbéciles o una masa de carne con ojos? Su hierro de aquí en adelante debería denominarse "Nuñez del Novillo o del Culillo" como usted prefiera. Volvió Juli a intentar tomarnos el pelo con otra faena pueblerina para contentar a los beodos del tendido.

Un saludo.
Germinal García