Nueva entrega de la franquicia Underworld, en la que la vampira Selene (Kate Beckinsale) deberá defenderse de ataques brutales de los dos clanes, el de los Lycans y el de los Vampiros que la traicionaron. Con sus únicos aliados, David (Theo James) y Thomas su padre (Charles Dance), ella debe detener la guerra eterna entre Vampiros y Lycans, aunque signifique tener que hacer un último sacrificio.
-YA EN CINES- No apta para no fans de la saga "Underworld", es una película que respira de sus predecesoras y aunque al principio de cada cinta cuenta lo que ha sucedido anteriormente, puede perder a los espectadores que vayan de nuevas a verla.
Para los nostalgicos, para la gente que como yo, adora el personaje de Selene y la queremos ver viva y coleando, o lo menos muerta posible, nos lo pasaremos bomba.
Personalmente, mucho mejor que la anterior, la cual fue un poco despropósito o el no saber como llevar las cosas, pero la directora Anna Forrester, se toma su tiempo para contarnos una historia que enlaza el pasado que se nos contó en su momento y el presente.
David y Selene están en una cuenta atrás, los hombres lobo o los licántropos, buscan algo desesperademente y si Lucian, a mí me pareció un líder que no podía ser sustituido fácilmente, es borrado del mapa por un nuevo "jefe al mando" que no tiene nada que ver con el antiguo líder de los licántropos.
Selene, necesita un descanso y se la nota en esta película, pero creo que el conocer a nuevos aliados hará que renazca, que luche por lo que más quiere.
Si la anterior producción fue, a medida desesperadas, hacemos todo rápido y sin sentido, aquí todas las piezas del puzzle toman sentido y significado y sobre todo hay tres revelaciones que nos dejarán a los fans de Underworld con la boca abierta.
Es una película entretenida, eso lo se, pero los efectos especiales y visuales en esta producción están por los aires, no pecan de utilizar muchos, he visto películas con más efectos que esta, pero cuando lo hacen, la artillería pesada "es de buena calidad".
Me lo he vuelto a pasar bomba, aunque sin duda mi favorita seguirá siendo la primera película de Underworld, con esta me he recuperado del susto de su predecesora y la he disfrutado mucho.
Ojalá Kate Beckinsale vuelva a ponerse el traje de Selene, porque aparte de ser un personaje letal, en él, veo sentimientos, veo un personaje femenino, pero sabe de lealtades y sabe por quien debe luchar y que debe de realizar.
Aunque por otro lado, se merece un descanso, aún así, gracias Anna Forrester, por devolverle a Selene su carisma.