[Opinión] The Good Wife, equipo rojo contra equipo azul

Temporada a temporada, The Good Wife se ha ido afianzando como una de las principales joyas de la televisión actual, y una de las series más esperadas cada semana. Para algunos, la temporada anterior supuso un pequeño bajón de ritmo, y en la primera mitad de esta cuarta las críticas fueron feroces, especialmente por la trama de Kalinda y su marido Nick. Sin embargo, el matrimonio King respondió con contundencia a las críticas, eliminando al personaje de raíz, y la serie volvió a ser una de las más alabadas. Y este último capítulo ha sido el broche perfecto a la temporada.

Según yo lo veo, la recta final de la temporada se ha centrado en un tema: ¿Es Lockhart & Gardner una familia bien avenida o más bien un simple lugar de trabajo en el que los empleados no se mueven por motivos emocionales? En una serie como The Good Wife, en la que la separación familia/trabajo es más que difusa, y el concepto de familia es uno de los pilares fundamentales, esto ha provocado que todos los personajes tengan que replantearse sus posiciones vitales. Tanto en lo sentimental como en lo laboral.

La crisis económica ha afectado a lo grande al bufete, que ha estado al borde de la bancarrota. Esta situación ha acabado derivando en el planteamiento de una estrategia: ofrecer a varios abogados de cuarto año convertirse en socios de la firma. Finalmente tuvieron que echarse atrás y sólo se lo ofrecieron a Alicia. Ésta descubre pronto que su nueva categoría no es todo ventajas, y que estar en el bando que toma las decisiones supone, en muchos aspectos, pasar a “el lado oscuro”. Por su parte, el resto de abogados, espoleados por esta injusta situación, deciden, liderados por Cary, formar un nuevo bufete llevándose a varios clientes importantes.

Y aquí llega otros de los grandes temas tratados en estos últimos capítulos: el idealismo. En varios capítulos, pero especialmente en el 4.20, ‘Rape: A Modern Perspective’, se han planteado este asunto, y esto ha influido también en la decisión final de Alicia: ¿es el momento de asentarse o aún puede luchar por hacer algo mejor? Ya se ha dado cuenta de que ser socia de Lockhart & Gardner supone tener que tomar decisiones contrarias a sus principios pero, ¿puede hacer otra cosa? Según Cary, sí: montar un nuevo bufete con él para así, en sus propias palabras, “cambiar el mundo”. Y si algo sabemos de Alicia Florrick es que es una idealista. Pueda actuar en consecuencia o no.

Pero, ¿tiene esta dualidad su equivalente en la vida personal de Alicia? ¿Es Peter el pasado, la oscuridad, y Will el idealismo que ella persigue? ¿O son los dos el pasado y se encamina sin saberlo hacia nuevos pastos no sólo en lo profesional sino también en lo personal? Aunque está claro que el alejamiento de Will, uno de los motivos por los que ella abandona la firma, puede acabar indirectamente en un acercamiento al no ser él ya su jefe, si dependiera de mí optaría por incluir sangre nueva. La situación Alicia-Peter-Will necesita refrescarse y la entrada de otro agente podría ser la respuesta. Y que yo quiero para Alicia un buen maromo que le dé alegrías y no tanto quebradero de cabeza, aunque sea para unos capítulos.

En cualquier caso, la decisión que han tomado Cary y Alicia, que ya se adelantaba en aquel falso juicio del 4.14 ‘Red Team, Blue Team’, es un gran game changer que nos va a dejar mordiéndonos las uñas todo el verano. La serie puede cambiar completamente. Cary pasará a la categoría de protagonista absoluto, y los dos tendrán que enfrentarse a los retos imposibles que les supone este salto al vacío. Con la victoria de Peter en las elecciones, su vida pública estará, si cabe, aún más en el punto de mira. Además, le ha prometido a Diane un puesto en el Tribunal Supremo. ¿La veremos de juez y, por tanto, fuera de la primera línea de la serie? ¿Qué pasará entonces con Lockhart&Gardner? ¿Tendrá el mismo peso en la serie que la nueva firma? ¿Se convertirá en Lee&Gardner? ¿Gold&Gardner? ¿Gardner&Associates? ¿Cuál será la función de Eli y qué bufete elegirá? ¿Más gente cambiará de bando? ¿Alguien regresará? ¿Se quedará realmente Kalinda al saber que Alicia se va? Sería interesante ver a la investigadora enfrentarse a sus amigos y, además, algún personaje principal tiene que quedarse con Will, pero resulta raro pensar que los caminos de Alicia y Kalinda vayan a separarse. Todos estas incógnitas y muchas más quedarán sin respuesta, desgraciadamente, hasta la temporada que viene.

Pero hay una última incógnita sobre la quinta temporada: ¿qué invitados saldrán? ¿Meryl Streep? ¿Obama? Porque puede que las dinámicas de la serie sean cada vez más oscuras, pero eso no impide (o quizás facilita) que todo Hollywood quiera pasarse por ella. Y más sabiendo lo bien que sacan jugo a sus invitados, aunque sólo salgan en un episodio. A ver quiénes están nominados este año al Emmy, porque candidatos hay de sobra. Esta temporada han pasado por The Good Wife caras nuevas como Stockard Channing (¡grandísimo fichaje!), Christina Ricci, Amanda Peet, Nathan Lane, Maura Tierney, Kristin Chenoweth y hasta el alcalde de Nueva York. Además, han regresado viejos conocidos como Martha Plimpton, Michael J.Fox, Mike Colter, Carrie Preston, Dylan Baker, Matthew Perry, Mamie Gummer, Gary Cole, Denis O’Hare… La verdad es que, repasando la lista, yo llenaba toda la categoría de Actor Invitado con The Good Wife. Habrá que esperar a ver si la serie vuelve a congraciarse con los premios en esta excelente temporada. Desde luego, merecido lo tiene. Aunque sólo sea por ser el único drama con el que te ríes más que con cualquier comedia. Y esperemos que lo sea por muchos años.