El cruento final de Christopher Stevens
Este hombre era así. Christopher Stevens, con 21 años de servicio diplomático para EE.UU, murió por las heridas que sufrió en el ataque contra el consulado americano en Bengasi. Llevaba más de dos décadas de dedicación a la tarea de estrechar los lazos entre los pueblos de Oriente Medio y el Norte de África. No le importó arriesgar su vida para ayudar al pueblo libio a sentar las bases de una nación nueva y libre.
Stevens acabó así su existencia esta semana en Libia. ¿Por qué? El embajador de Estados Unidos, Christopher Stevens murió en un ataque llevado por hombres armados que protestaban contra la película que califica al islamismo de "cáncer", y promocionada por el controvertido pastor de Florida (sureste) Terry Jones.
El mundo no puede perdonar esto
La película de la polémica que acabó en el final Christopher y otros tres norteamericanos
Paradójicamente, los ataques en Bengasi y El Cairo fueron los primeros a instalaciones diplomáticas en ambos países, y dieron un giro en esas dos naciones árabes que se esfuerzan por superar la conmoción causada por el derrocamiento de sus líderes autoritarios, Moamar Gadafi y Hosni Mubarak, respectivamente, en levantamientos el año pasado.
Las protestas en ambos países, en cuestión, fueron causadas por la indignación que provocó una película que ridiculizó al profeta Mahoma, producida por un cineasta israelí residente en California y promovida por una campaña extremista antimusulmana en Estados Unidos. Escenas de la película dobladas al árabe fueron cargadas en YouTube. Véa aquí algunas imágenes del atentado y la reacción del mundo musulman:
FUE POR UNA PELÍCULA
YEMEN AHORA SALPICADO