Mi viejo rebelde, semblanza de Osvaldo Bayer que filmó su hija Ana, volverá a exhibirse en nuestra ciudad tras la primera tanda de presentaciones que tuvieron lugar a fines de 2018 en nuestro país, después de la première en Alemania y poco antes del deceso del periodista e historiador argentino. Una función en Barracas y otra en Villa Crespo figuran en el programa que los administradores de esta página oficial de Facebook publicaron ayer, y que también anuncia proyecciones en las provincias de Buenos Aires, Entre Ríos, Santa Fe, San Juan, La Rioja y Neuquén.
Entre el 21 de marzo y el 12 de abril se sucederán las funciones organizadas a pulmón en quince salas ajenas al circuito comercial y a la red de salas que administra el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales. Como su predecesora, la nueva tanda de proyecciones se relaciona con el deseo que Bayer hija expresó en uno de los mensajes que intercambió con Espectadores en septiembre pasado: “Me gustaría que el documental viaje por todos lados, como hizo mi padre”.
De los cuatro hijos de Don Osvaldo, Ana es la menor y la única mujer. Radicada hace años en Italia, se instalará en la Argentina mientras su película recorra nuestro país a principios del otoño austral.