Otoño es una estación muy mágica; la caída de las hojas y la recolección de los alimentos para pasar el invierno. Durante esta estación encontraremos el Equinoccio otoñal el día 22 de septiembre, donde el día y la noche dura el mismo tiempo.
Durante septiembre es tiempo de fiesta para aves y mamíferos que se recuperan de la estación de cría y la temporada de muda de plumas. Es buen momento para la recolecta de frutos como reserva para el invierno. La madre Gaia es muy cooperativa, los arbustos y los árboles ofrecen sus frutos a los pájaros y demás animales, con la intención de distribuir sus semillas por todas partes.Si tenéis la oportunidad, buscad los árboles de saúco, observar las bayas del espino rojo, las endrinas y por supuesto los frutos del bosque. Las bellotas, castañas, avellanas, setas y calabazas también entran en el menú de nuestras cocinas en muchísimas recetas.En los ríos, los salmones emprenden su camino hacia las zonas más altas. Las golondrinas, vencejos y aviones se reunen para su épico viaje hacia el sur, en busca de tierras más cálidas. En los estanques y lagos, tened cuidado con los cisnes mientras mudan su plumaje de invierno, pues pasan bastante estrés y están un poco agresivos.Os propongo una cosa.... Podéis crear vuestro propio compost para las plantas con residuos orgánicos de cocina como pieles de manzana o patatas... Será un delicioso abono para el jardín.
¿Qué pasa en el bosque? Las ardillas almacenan las nueces y bellotas para el invierno. Observar y fotografiar a los pájaros comiendo bayas y buscando pequeños invertebrados entre el follaje de hojarascas, o escuchad el "clics" de los murciélagos durante la temporada de apareamiento.En octubre es el tiempo de decir adiós a los que se fueron en la migración y darles la bienvenida a los recién llegados. También es temporada de la famosa "berrea" de los ciervos machos que miden su masculinidad y enfrentan en serios combates contra otros machos, para conquistar al mayor número de hembras posibles. En los campos de rastrojos y humedales, podemos encontrar a los gansos que llegaron de Groenlandia, buscando lugares más templados. Las tórtolas tras un largo viaje desde Rusia y los países escandinavos se dejan caer por el sur de Europa, donde las podremos ver en campos abiertos y setos.En esta época, veremos a varias especies diferentes de pájaros en el bosque formando bandadas para alimentarse y "charlar" entre sí con sus cantos variados, o a las ardillas rojas en la copa de los árboles recogiendo comida. En los jardines, los erizos y topillos buscan encontrar un buen lugar para pasar el invierno, y si queréis ayudar, pues amontonar una pila de tablones de madera o ramaje formando un montículo, será suficiente para que puedan encontrar un sitio acogedor en los días de frío.
Durante el mes de noviembre, la migración del otoño está casi terminada, tan sólo unos pocos rezagados que se quedaron en el lugar a pasar el invierno.¿Qué encontramos este mes?, las hojas han dejado las ramas de los árboles y caído al suelo, pudriéndose gradualmente y restaurando los ricos nutrientes para las raíces de las plantas y árboles. Es parte de la naturaleza -muerte y renacimiento. Aunque los árboles hayan perdido las hojas, también podemos apreciar una belleza de arquitectura en los bosques y jardines; preciosos troncos y ramas desnudas. Los arbustos y árboles se preparan para los vientos y las lluvias invernales. En el bosque podemos buscar pistas y huellas de animales, será una preciosa aventura y enseñar a los peques de la casa a cocinar un poco más la naturaleza. En esta época, se puede oír claramente a los faisanes macho y urogallos cantar, reclamando sus territorios.
Pero aún hay un ave que queda por llegar en su camino desde el norte de Rusia, la becada vendrá con la primera luna llena de noviembre. Muchas aves habrán comenzado su migración desde los Montes de Urales, a casi 4000 km de distancia. Capaz de viajar hasta 600 km sin parar. La becada debe descansar y acumular gran cantidad de grasa corporal antes de emprender su largo viaje. Y recordad que este ave es muy difícil de ver, muy esquiva, y si os topáis con una, sentíos afortunados/as y por supuesto tan sólo observarla sin molestar.Podremos contribuir para ayudar a los pequeños pájaros con comederos llenos de alpiste, mijo, semillas de girasol y migas de pan, o pasando unos cuantos cacahuetes por un trozo de lana con ayuda de una aguja grande y colgarlo en una rama o balcón que dé al exterior del jardín (buscad por la web cómo hacer comederos para pájaros, hay un montón de ideas muy originales). Las aves lo agradecerán, ya que ahora es bastante complicado encontrar alimentos. Y si en un rincón del jardín colocamos un gran manojo de hojas secas, será un nuevo hogar para pequeños invertebrados o lagartijas. Disfrutar del canto alegre de los pájaros al atardecer, es pura magia! =^..^=Qué paséis un feliz y mágico otoño!! :)
Nota: Por supuesto dar las gracias a todos los que colaboraron con sus fotos para crear este artículo mágico. Muchas gracias chicos/as!!