otra desgracia más...nueva zelanda

Foto: © SIMON BAKER / REUTERS

WELLINGTON, 24 Feb. (EUROPA PRESS) -

   El superintendente del distrito neozelandés de Canterbury, Dave Cliff, asegura que ya son 98 los cadáveres trasladados a la morgue temporal establecida tras el terremoto del martes en el sur del país, y advierte de que el balance puede seguir subiendo, informa la televisión estatal. El terremoto "realmente ha sacudido Canterbury hasta el tuétano", ha declarado por su parte el primer ministro, John Key.

   Todavía hay cientos de desaparecidos, pero los equipos de rescate han ido perdiendo la esperanza de recuperar a alguien con vida bajo los escombros en Christchurch. No obstante, Cliff afirma que la prioridad sigue siendo la búsqueda de supervivientes.

   Los heridos se cuentan por varios miles, y más de 150 están graves. Hasta la mañana del jueves (noche del miércoles en España) habían llegado al departamento de urgencias del hospital de Christchurch más de 400 personas, informa el diario 'New Zealand Herald'.

   La Policía tiene previsto hacer pública una lista con los nombres de algunos muertos y desaparecidos. Además los agentes intentan determinar si los desaparecidos se encontraban dentro de edificios o en lugares abiertos durante el seísmo, de 6,3 grados en la escala Richter.

   Concretamente en la Catedral, la Policía estima que han muerto entre 16 y 22 personas. En el edificio de Canterbury TV hay atrapadas más de 122 personas, la mayoría estudiantes y personal de un centro educativo que tenía su sede en el mismo inmueble.

   Además hay temor de que el hotel Grand Chancellor, uno de los edificios más altos de la ciudad, termine por derrumbarse. Por el momento ha aguantado la réplica de magnitud 4,1 ocurrida después de medianoche (tarde del miércoles en España) que se suma al centenar registrado desde que se produjo el terremoto.

   Key vaticina que el Gobierno deberá llevar a cabo un "inmenso trabajo de recuperación" y adelanta que ya se planea un paquete financiero de ayuda a los afectados. La ministra de Desarrollo Social, Paula Bennett, ha confirmado que casi 10.000 personas están recibiendo fondos con carácter de emergencia.