Toma un minuto de tu tiempo y responde a las siguientes preguntas, puede serte muy útil:
- ¿Te parece que las personas hablan muy bajo?
- ¿Te resulta difícil seguir las conversaciones telefónicas?
- ¿Te dicen que pones la televisión y la radio muy alta?
- Has notado que tienes que pedir que te repitan las palabras?
- ¿Evitas las reuniones con más de una persona o en lugares bulliciosos?
- ¿A veces oyes sin entender las palabras?
- ¿Te dicen que hablas muy alto?
- ¿Los sonidos agudos, como el chillido infantil o un chirrido, son más difíciles de oir?
- ¿Orientas uno de tus oídos para entender mejor a los demás?
- ¿ Sueles "pensar en tus cosas" durante las reuniones con otras personas en lugar de participar activamente en las conversaciones ?
Ana Hidalgo
