A los primeros visitantes al planeta Gliese 581 b les podría resultar difícil caminar. Con una masa 8 veces superior a la de la Tierra, es probable que la fuerza de gravedad en su superficie sea el doble que la de nuestro planeta. Pero no es la tierra lo que queremos explorar de este planeta, sino el agua. El planeta está cubiero por grandes océanos, y debido a que una de sus caras muestra mira siempre a su sol, es posible que esté experimentando un efecto invernadero. Aunque la cara nocturna del planeta es posible que sea fría y posiblemente gélida. Entre estos extremos existe una zona de transición, que podría ser un hábitat adecuado para la colonización de seres humanos. A la espera de ésto, se transmitieron mensajes desde el radiotelescopio de 70 metros DSS-43, situado en Canberra, Australia, en agosto de 2009. Como muy pronto la respuesta del sistema de Gliese 581 d llegaría en 2049. Continuará...