Palabras prohibidas: deberíamos haber…

Las palabras que utilizas para describir tu mundo determinan como lo ves . Por eso la palabra “quiero” tiene tanto poder. Mientras “quiero” en su forma positiva es una palabra recomendable, también hay algunas palabras que intento borrar de mi vocabulario. Una de estas expresiones es el “debería haber hecho…” en todas sus conjugaciones.

Debería haber salido antes de casa, debería haber llamado a fulanito, no deberíamos haber vuelto tarde ayer… Pero qué se le va a hacer? Ya es tarde, no puedo volver atrás en el tiempo para rectificar algo que haya o no haya hecho ya, así que más me vale vivir y aprender de las consecuencias. Los estóicos incluyen el ejercicio de no quejarse por acciones pasadas entre sus tácticas para una vida más tranquila y menos estresante. Si no puedes cambiar el pasado, no vale la pena preocuparse por él. Aprende tu lección y sigue adelante.

Lecciones aprendidas del “debería”

Así que he decidido no utilizar los “debería” de la vida como lamentaciones sino como lecciones. Cada vez que me doy cuenta de que estoy utilizando el debería, analizo cual ha sido la razón y cómo lo puedo evitar en el futuro. De esta forma me aseguro de decir debería cada vez menos, mientras cambio mis hábitos casi sin darme cuenta.

Debería haber salido de casa 5 minutos antes. Una queja muy común entre la gente que baja las escaleras del metro empujando a todo el mundo. ¿Cómo evitarlo? Si sales de casa 5-10 min antes de lo necesario, podrás hacer el camino con calma. Además, siendo puntual mostrarás tu respeto por la otra persona.

No debería haber comprado esto. Una situación que se da especialmente durante las rebajas. La oferta era tan buena que no podías resistirte y ahora tienes este monstruo rosa-chillón en tu armario. ¿Cómo evitarlo? Pásate al lado de los consumidores responsables. Lo que quieres comprar va a la lista de los 30 días. Y si no tienes tiempo para esperar tanto, visualiza ya que otro objeto tendrá que dejar tu casa a cambio de esta nueva adquisición.

Debería haber hecho esto ayer. Esta queja suena a un sistema productivo deficiente. Si te olvidas a menudo de cosas que querías hacer, entonces ya es hora de buscar una solución duradera. ¿Cómo evitarlo? Informate sobre diferentes alternativas para mantener tus tareas en orden: GTD, autofocus, la caja de la productividad… hay un sinfín de métodos productivos y con un poco de dedicación encontrarás el tuyo.

¿Qué “debería” quieres sustituir hoy por una acción preventiva?

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Imagen: Blisco_O / flickr