Pantalla global: La era de la omnipantalla

Si no lo veo no lo creo, esta frase bien prosaica viene a expresar de forma muy simplificada el discurso subyacente de Pantalla Global en el CCCB. Gilles Lipovetsky y Jean Serroy han traducido en proyecto expositivo el discurso de su ensayo La Pantalla Global acerca de la omnipresencia de pantallas en nuestra vida y la mutación cultural que de ella está derivando.

Vista de la exposición. CCCB, 2012. Foto: Camilayelarte

Si a lo largo de los siglos la Historia se ha convertido en tal a través de la palabra escrita, del texto, podemos afirmar que a partir de la segunda mitad del siglo XX es Historia aquello que puede acompañarse con imagen. Somos una sociedad eminentemente visual, nos expresamos y relacionamos a través de la imagen reproducida en pantallas. La sensación al visitar Pantalla Global, o al menos una de ellas, es precisamente constatar que aquello que nos define de forma cultural, histórica y sociológica puede expresarse a través de imágenes, prescindiendo de la palabra escrita.

L'imperi de les estrelles, realización Toni Curcó. CCCB, 2012. Foto: Camilayelarte

La omnipresencia de imágenes/pantallas en nuestra vida se aborda en las exposición desde siete temas: la historia, la política, el deporte, la publicidad, el exceso, la vigilancia y por último el juego. Cada sección cuenta con un montaje visual que analiza la evolución y la transformación de cada tema en cuestión. A diferencia de otras exposiciones con material audiovisual que hemos podido ver en Barcelona en el último año (recordemos la pretenciosa Esteu a punt per a la televisió en el MACBA o El d_efecto barroco en el CCCB el año pasado) Pantalla Global es bastante benévola con el tiempo que debemos dedicarle. No es una exposición corta pero el formato y la edición de los vídeos es lo suficientemente atractiva a nivel visual como para que no se nos haga pesado sentarnos a mirar, y es que es esto mismo lo que tenemos que estar dispuestos a hacer para visitarla, sentarnos y dedicarle la media de 7 minutos que dura cada sección.

Pantalla política, realización José Antonio Soria,  CCCB, 2012. Foto: Camilayelarte

Contracamp Història. CCCB, 2012. Foto: Camilayelarte

La gran novedad a nivel conceptual que aporta Pantalla Global es que junto con la tesis que se expone de los comisarios podemos visitar también la contratesis o contracampo como lo llama el CCCB, realizado por el  público  que ha querido participar en el proyecto. Si bien la idea es pionera en lo que podríamos llamar crowd curation (el público como comisario), a la práctica puedo decir que el inmenso material que se nos ofrece hace que la exposición se alarge demasiado y de un poco de pereza perderse en la aportación de los vídeos hechos por el público, el contracampo pierde ante el campo por ser más atractivo en el formato en el que se ofrece al visitante.

Pantalla publicitat, realización Canada. CCCB, 2012. Foto: Camilayelarte

Pantalla vigilància, Benet Román, La Chula productions. CCCB, 2012. Foto: Camilayelarte

Pantalla juego, dirección creativa Rory Lambert. CCCB, 2012. Foto: Camilayelarte

Y es que lo mejor de Pantalla Global es que no tenemos que entenderla del mismo modo en que habitualmente entendemos las exposiciones, lo que se ve en las salas del CCCB es sólo una parte de una estructura compleja que se desarrolla en distintas plataformas. No se trata de salir por la puerta de la sala de exposiciones y considerar cumplida la visita, sino de adentrarse en el resto de los ámbitos donde la exposición continua y expande su tesis y sentido de ser. Pantalla Global es también la página web donde podemos ver los vídeos aportados por el público, pero también el espacio virtual que reconstruye el discurso implícito en las distintas secciones que se ven en el CCCB. Es en definitivas cuentas una exposición que considero que hay que ver por las reflexiones visuales y más tarde conceptuales que plantea, como el papel que juega lo visual y la imagen en cuestiones que nada tienen que ver con el arte sino con la sociología y porque es un primera experiencia de un nuevo modo de entender y plantear lo que es y puede llegar a ser una exposición 2.0, una exposición del siglo XXI.
Lo mejor: El impresionante trabajo de investigación de material visual previo y su posterior selección y edición, que da como resultado unas instalaciones de vídeo realmente entretenidas.
Lo peor: El sonido. Se percibe cierta sensación de caos sonoro entre una instalación y otra, lo que hace que tampoco apetezca mucho pararse a curiosear por el contracampo.
Pantalla Global, CCCB, Barcelona, hasta el 28 de mayo 2012.