![Papa Francisco llama a Milán a la memoria y a la solidaridad Papa Francisco llama a Milán a la memoria y a la solidaridad](https://m1.paperblog.com/i/430/4308294/papa-francisco-llama-milan-memoria-solidarida-L-EYC5gy.jpeg)
Casi un millón de personas acogió Papa Francisco en el Parque de Monza pero el nuestro cuento sale de una parroquía historica de Milán con la que hemos vivido este día desde la mañana hasta la longa noche del desastre de la organición y la gran emoción por Francisco.
Más de cien fieles de la parroquía Santa Maria de la Asunción en Turro empezan sus camino hacia el Parque de Monza para la misa de Papa Francisco, evento central de la visita pontificia. Una parte de ellos se prepara para el encuentro en el Estadio de San Siro con los jóvenes de la conformación por la tarde mientras que los voluntarios y el coro ya estan en el Parque por la mañana.
A las 12 de la mañana el pueblo de Dios ya está listo para acoger Papa Francisco bajo de un sol de verano entre las calles de Monza, ciudad fría, seria, quizás demasiado encerrada en su miedo por la ola de fieles que llegan de todas las ciudades de Lombardia: hay las personas que recuerdan la JMJ en Cracovia, quien ve el cuarto Pontifice en Milán, familias, viejos, jovenes, todos unidos para vivir un día particular propio en Milán, ciudada que riesga perdir su elementos fundamentales.
Papa Francisco llega al Parque de Monza y saluda a la multitud de fieles con su tipica papamóvil descubierta y sin embargo la parroquía de Turro prefiere la reflexión y el rezo al selfie y a la cursa hacia el coche pontificio y se prepara a la Misa donde Francisco no pierde la ocasión para relanzar un mensaje fuerte en tres palabras, comentando el evangelio de la Anunciación a Maria: memoria, unidad del pueblo de Dios y esperanza.
Papa Francisco invito todos a conservar la memoria de las guerras y de la pobreza de los padres, del pasado de esta ciudad, a permanecer no solo milaneses, ambrosianos pero internacionales, listos para abrir las puertas a los inmigrados, a las personas en dificultad que tiene un sentido particular para una parroquía muy antigua donde los primeros ciudadanos fueron empleados de los districtos industriales de Sesto, donde hay una gran presencia de latinos y filipinos.
Papa Francisco habla a todos los conservadores positivos que son la gran parte de la Iglesia de Milán, una Iglesia veloz, formal pero buena y traicionada por la involución de la ciudad, la necesidad del lucro y de la especulación y la tristenza de una sociedad que está cerrando sus fronteras y sus ocasiones para todos que representaban la capital industrial de Italia y llama todos a creer que lo que parece imposible puede convertirse en imposible.
No hay confusión pero una gran silencio interrumpido por pocos aplausos excluida la aclamación final, que no crea conmoción pero una gran concienca de los objectivos, del mensaje de Francisco, dificil, casi duro, repetido también a los jóvenes en San Siro pero ya llega el tiempo de salir, de volver a la parroquía para lograr repetir el mensaje a todos los fieles no presentes.
El pueblo unido sigue caminando en el Parque de Monza, dentro de la ciudad, pero queda bloqueada en la estación de Monza donde se concretiza la revolución contraria al pensamiento de Papa Francisco: casi un millón de personas estan por casi cinco horas en espera del ingreso en el sitio y de los trenes que llevan retraso hasta una hora y obligan la parroquía unida a dividerse para empezar un nuevo viaje bajo de la lluvia hasta la primera estación libre.
El longo día se concluye con una ciudad que aún tiene que asorbir el mensaje de Francisco: memoria, unidad y solidaridad y esperanza, todos los sentimientos que parecen no partenecer a una sociedad donde el triunfo del lujo, del soborno ensucia los esfuerzos de una Iglesia y de una comunidad que no siente el apoyo de las instituciones y vive el día a día. Demasiado poco por un mensaje así fuerte y una camino así longo y duro fisicamente y espritualmente.