Una casa para vivirla y disfrutarla en cualquier época del año. Todo está cuidado al más mínimo detalle. Amplio, luminoso y precioso es el dormitorio. La cocina, una cucada. Los muros originales conservados que se dejan ver. Techos abovedados por toda la casa y un maravilloso jardín. Para los amantes del estilo rústico, no se si puede pedir más.