El mes de Abril comenzó con un pequeño parón lector:Curiosamente, las vacaciones de Semana Santa en vez de hacerme más productiva leyendo, empezaron con un parón lector importante...pero estuve haciendo otras cosas, incluída descansar, que es muy necesario.
Pese a todo, volví a tomar ritmo y hoy te cuento sobre mis últimas lecturas que han sido muy, muy variadas. ¡Pasen y lean!
1. Se tiene que morir mucha gente, de Victoria Martín.
Tenía ganas de leer este libro porque conozco a Victoria Martín del podcast “Estirando el chicle” y me río bastante con sus ocurrencias aunque reconozco que tiene un nivel de intensidad que no es para todo el mundo.
Aun así, como te digo, me gusta y tenía ganas de leer su novela. Pero no me ha convencido del todo y te explico por qué. Empiezo por dejarte la sinopsis.
Bárbara trabaja como asistente de guion en un programa de entretenimiento repleto de hombres que se creen tremendamente graciosos, es adicta a los ansiolíticos y está obsesionada con el dinero. Vive con su amiga de toda la vida, Maca, una aspirante a actriz que solo acumula rechazos en su currículum. Un día recibe una invitación de Elena, antigua compañera del colegio, para acudir a una de esas fiestas donde anuncian el sexo del bebé explotando un globo, cortando una tarta o lanzando un cohete. Decide ir porque necesita poner en orden su vida, y participar del capitalismo más descarnado engullendo un cupcake en forma de bebé le parece la mejor manera de empezar. Pero tras la fiesta, Elena, desesperada y en la recta final de su embarazo, abandona a su marido y se muda con Bárbara y Maca, una noticia terrible para ellas que trastocará por completo sus vidas. Al grupo se unirá Fabiola, una influencer con una marca de joyas «sostenible» que hacen niños en Bangladés y que comparte en Instagram frases como «Si quieres, puedes» o «Hakuna Matata». Es decir, un adulto funcional siguiendo los consejos de Pumba, el jabalí de El Rey León.
Así comienza esta historia: una embarazada ciclotímica, una actriz fracasada, una influencer inestable y una guionista frustrada tendrán que enfrentarse a una vida que no es la que realmente querían ni esperaban. Una novela sobre la inacción frente a los problemas del día a día que narra con ironía la historia de unas amigas, que se vuelven a reencontrar para descubrir que lo único que tienen en común es el paso del tiempo.
Pues bien, la protagonista es totalmente Victoria Martín y su discurso habitual. Es como estar viéndola y, si conoces los podcast, te van a sonar casi todos y cada uno de los comentarios que hace la protagonista del libro. Esto me hacía que me costase entrar en la historia porque no parecía eso, una narración para contarte algo, sino un texto para transmitirte sus enfoques. Aparte que, a nivel de acción, tampoco es que sea una trama con grandes acontecimientos,l a verdad.
En fin, no puedo decir que sea una lectura mala o desaconsejable, es amena y te ríes, pero desde luego, no volvería a leer otro de la autora con mucha gana, no aporta gran cosa.
2. Violet hace el puente sobre la hierba, de Lana del Rey.
Seguro que conoces a Lana del Rey por su música, pero tiene también un libro de poesía. Mi hija Irene es muy fan de la artista y se compró este libro, que por supuesto he leído y me ha gustado muchísimo.
Leer poesía traducida es toda una aventura y aquí, la traducción tiene mucho mérito. Debo realzar la figura de Elvira Lindo que – no es la primera vez que leo algo traducido por ella – es fantástica en este sentido.
Te dejo por aquí la poesía que da título al libro que además es una de las que más me ha gustado por todo lo que transmite:
3. Cloruro de Sodio, de Jussi Adler Olssen
Me encantan las novelas del Departamento Q y las le leído todas. Están protagonizadas por Carl Morck, un veterano policía investigador en cuyo departamento se resuelven casos que están descartados hacen ya muchos años.
En todas estas entregas, además hemos podido conocer a sus singulares compañeros, Assad, Rose y Gordon que forman parte del Departamento. Cada caso es autoconclusivo, aunque los personajes van evolucionando. En este, además, se encuentran en plena pandemia y el caso que les ocupa nos lo cuentan en la sinopsis:
El día de su sesenta cumpleaños, una mujer se suicida. Su muerte conduce a la reapertura de un caso sin resolver desde 1988. Con gran estupefacción, Carl Mørk y el equipo del Departamento Q descubren que, durante treinta años, un asesino particularmente astuto ha elegido a una víctima en una fecha señalada, haciendo pasar el asesinato por un accidente o un suicidio. Y siempre deja en la escena del crimen un montoncito de sal. En el contexto de las restricciones sanitarias debidas al covid-19, que dificultan aún más su trabajo, el Departamento Q se embarca en una investigación cuyo alcance no pueden ni imaginar.
Aunque…me he enfadado un poquito con este caso, el noveno de la saga, porque en el final queda algo pendiente para el próximo libro con respecto a Carl, el inspector protagonista…¡no puedo esperar! Jajaja.
4. En la boca del lobo, de Elvira Lindo
A veces me gusta salir de mi zona de confort: voy a una librería y cojo libros que no sean thrillers o autores que haya leído anteriormente y me compro uno que cumpla esas condiciones y me llame la atención.
Justo me pasó eso con este de Elvira Lindo, a quien te acabo de mencionar en su labor como traductora y a quien todos conocemos por su saga de Manolito Gafotas. Decir de entrada, que no tene nada que ver con los libros infantiles de la autora, lo cual es esperable, pero lo que sí me ha sorprendido es, aparte de la maravillosa pluma para narrar y describir enclaves y personajes, la acción de la novela que comienza con un estilo intimista, de drama familiar y, aunque es el tono general de la obra, va aproximándose al thriller a cada página. Y el final, que sin duda, es demoledor y con un toque de realismo mágico muy bonito.
¿Se nota que me ha encantado? Pues eso.
Te dejo también la sinopsis:
Julieta y su madre llegan a La Sabina a pasar las vacaciones. A sus once años esa aldea perdida le parece a Julieta el mejor lugar para dejar atrás problemas a los que no sabe poner nombre. Ese verano eterno lleno de primeras veces, descubrirá que los cimientos del pueblo están hechos de secretos y recuerdos; los lindes del bosque, de cuentos y leyendas; y el corazón de las personas de miedo, odio, amor y esperanza, los cuatro sentimientos que nutren sus sueños y también sus peores pesadillas. En la boca del lobo surge de la mirada de una autora que ha destinado gran parte de su obra a observar la infancia en toda su riqueza, singularidad y vulnerabilidad, y muestra que las historias que compartimos, y las que nos contamos, pueden romper la maldición de una herencia envenenada. Elvira Lindo regresa a la pura ficción creando un territorio literario propio, la despoblada Sabina y sus bosques, un escenario en el que realidad y fábula se dan la mano, como en los cuentos clásicos. El lector que se adentre en él, se verá inmerso en una novela magnífica, de intensidad creciente, ante cuyo misterio solo podrá responder con asombro y emoción.
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