01/06/2013 - 13:54
© JPL
Pasó a 5.8 millones de kilómetros de la Tierra, no había posibilidad de que fuera un peligro para el planeta, pero el asteroide 1998 QE2 significó un hito para los sistemas de detección de objetos espaciales cercanos.
Así lo calificó Paul Chodas, científico del programa Near Earth Objects, de la Nasa. "Es uno de los primeros éxitos de nuestro esfuerzo por encontrar a los grandes asteroides que podrían golpear a la Tierra y causar una catástrofe global", dijo a CNN.
El asteroide, de 2,7 kilómetros de diámetro, viaja acompañado de una luna de aproximadamente 600 metros. Está compuesto en gran parte de carbono y su tamaño, de haberse dirigido a la Tierra, tenía el potencial para provocar una catástrofe global. Para comparar, los paleontólogos estiman que un asteroide de 6 kilómetros de diámetro provocó la extinción de los dinosaurios hace 65 millones de años.
La próxima oportunidad en que el QE2 se acerque a la Tierra será en 2028, cuando estará a 45 millones de kilómetros. Sse proyecta que en unos doscientos años más podría alcanzar una distancia similar a la de esta vez.
A pesar de significar un hito para el programa NEO, que ya ha identificado el 95% de los asteroides de tamaño peligroso, sólo un 10% de los que tienen menos de 150 metros (y que pueden destruir ciudades) ha sido detectados.