Forgetting Sarah Marshall (Nicholas Stoller, 2008. EEUU): una de las comedias más discretas surgidas de la factoría de Judd Apatow, aun así varios cuerpos por delante de cualquier cosa con Sandra Bullock, Jennifer López o Jennifer Aniston, pero que tampoco acrecenta el prestigio de la Nueva Comedia Americana (o comedia para gente de veinteymuchos y treintaypocos) pese a contar con algún que otro hilarante momento. Pocos, la verdad. Si acaso las apariciones de Jonah Hill. Una rubia, evidentemente muy atractiva, popular actriz de la tele para más señas, dejará a su novio, un loser, por otro, aparentemente mucho más cool. El primero, hundido, decidirá irse a Hawai a pasar unas vacaciones para olvidarse de todo, con tan mala suerte que coincidirá en el hotel con su ex y su nueva pareja. Situaciones más o menos divertidas aderezadas por el ameno estilo visual que todos estos autores imprimen a sus trabajos. Y, como de costumbre en estas cintas, le sobran bastantes minutos.
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