Revista Cultura y Ocio
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La vida es un continuo ir y venir de pasos. Pasos como decisiones. Pasos como dudas. Pasos como estatus personal. Pasos como pisadas sobre el camino a veces polvoriento, otras embarrado, a veces sosegado. Si no andas no hay camino, ya lo decía Machado, "se hace camino al andar". Camino como vida. Camino como experiencia. Camino como virtud. Un camino a recorrer sobre el que sólo prima una dirección posible para avanzar. El mundo no se extiende ante tí en el horizonte del camino esperando, pegado a la pared cóncava del mundo, a que llegues a él, sino que te envuelve por completo en un paquete de cielo y estrellas: Un regalo para el mundo. Una persona. El camino como morada personal es camino confortable. Búsqueda del camino como búsqueda de la felicidad. Felicidad como alegría por vivir. Felicidad como alimento. Felicidad como flor entre polvo. Felicidad como realización. Felicidad como bien insaciable y etéreo. Pasos que buscan flores en cada uno de los recodos del camino. Pasos que nunca se detendrán. Pasos que nunca se detuvieron.
Sea cual sea la razón, cada uno seguimos con nuestros pasos llenos de vida y novedad, los pasos de alguien que nos precede o nos precedió. Pisadas rápidas, pisadas lentas, estables, inestables.. Así avanzan, siempre hacia delante, los habitantes de este pequeño planeta llamado Mundo.