Esta tarta es muy conocida por toda la red y se le conoce como " Pastel Inteligente " porque al cocinarse este pastel este se separa en tres capas: Abajo una masa densa, en el medio la crema, y arriba un bizcocho esponjoso.
Esta es la versión ligera de este pastel, apta para dietas proteicas bajas en grasa, si se quisiera para una dieta rica en grasa y baja en hidratos, habría que sustituir el queso crema por mantequilla y la leche desnatada por leche normal.
Los sabores se pueden variar dependiendo de las preferencias de cada uno: se puede dejar de vainilla, o aromatizar por ejemplo con ron u otro licor de nuestro gusto o con sabor a limón o naranja poniendo la ralladura, cada vez se puede hacer diferente.
Este postre se lo dedico a mi nieto Victor que hoy cumple 2 añitos.
Precalentar el horno a 120ºC.
Mezclar el queso con edulcorante, apta obtener una mezcla uniforme.
Separar las yemas de huevo de las claras y añadir al queso poco a poco cada yema de huevo, mezclar hasta que la mezcla sea homogénea.
Añadir la leche tibia y la vainilla.
Tamizar el salvado con el almidón o proteína y añadirlo a la mezcla.
Batir la clara de huevo con una pizca de sal a punto de nieve e incorporar al resto de la composición.
Añadir poco a poco para que no se bajen las claras.
Verter la mezcla en un molde en el que hay que poner papel de horno con antelación.
Hornear a unos 120°C durante 1 hora o 1 hora y 10 minutos, dependerá del horno.
En algún blog he visto que lo hacían con horno precalentado a 180ºC durante 10 minutos y luego a 160ºC durante 50 minutos más.
Mi molde era de 23x23 y ha quedado un poco baja pero como era un experimento no quise poner el doble de cantidad, pero como la textura y sabor nos ha gustado la repetiré en en molde más pequeño o doblaré las cantidades si somos más. Fuente: Mabel y Edithskitchen
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