Cuando preparamos un plato de carne, normalmente, nos centramos en que esté perfecto, en su punto o muy hecho dependiendo de los gustos de los comensales, ya que será el centro de atención en la comida. Pero no hay que restar importancia a los complementos del plato ya que harán que el plato sea más completo, aquí tienes una guarnición fácil de preparar a la vez que suculenta y que seguro llamará la atención en tu mesa.
Las patatas Hasselback, surgieron en la escuela-restaurante Hasselback de Djurgarden, cerca de Stockholm; nació como una idea de los alumnos de cocina para darle más protagonismo a la patata como guarnición para las clásicas carnes asadas en verano. Tuvo tanta aceptación, y por supuesto por lo ricas que estan, que pronto se hicieron famosas tanto en Suecia como en el resto del mundo.
Origen de la receta: Suecia
Tiempo de preparación: 50 minutos
Tipo de receta: Guarnición
Ingredientes para 4 personas:
- 4 patatas medianas
- 100 gr de mantequilla
- 25 dl de aceite de oliva virgen extra
- 1/2 cucharita de café de ajo en polvo
- 1 cucharita de café de cebolla en polvo
- 1 cucharita de café de romero en polvo
- 1 cucharita de café de orégano en polvo
- 1 cucharita de café de sal maldon o sal de vino
Elaboración:
Precalienta el horno a 200 grados.Lava bien las patatas con un cepillo o un trazo poroso.
Ahora toca cortarlas, este proceso es fundamental, ya que dependerá de como queden las patatas al final.
Coloca cada patata entre dos cucharas de madera y haz unos cortes con una separación de 1 a 1,5 cm, pero ten cuidado en las puntas cuando cortes.
La cuchara de madera te servirá para no darle un corte completo a la patata, ya que tiene que estar completa. Hay quien usa palillo chinos en vez de cucharas, pero eso ya lo dejo a tu elección.
Reparte las patadas en un plato para hornear con un chorrito de aceite y coloca 15 gr de mantequilla encima de cada patata.
Mételas en el horno durante 30 minutos.Sácalas del horno y engrásalas con el aceite que tendrás en el plato.
Echa el ajo, la cebolla, el romero y el orégano en polvo encima de las patatas.
Baja a 180 grados la temperatura del horno.
Vuelve a meter el plato en el horno otros 10 minutos.
Saca el plato y echa la sal.
Y ya está todo listo para servir.
Últimos detalles: Los tiempos que las patatas estén en el horno dependerá sobre todo el tamaño de las patatas, cuanto más grandes sean, más tiempo necesitarán en el horno. Una manera de saber si ya están listas es pinchando con un palillo en los extremos de la patata, si ves que está un poco dura, déjala unos minutos más.
Bajar el horno de 200 a 180 grados, es sobre todo para que no se queme el ajo, la cebolla, el romero y el orégano en polvo que echaste encima de las patatas.
Aunque estas patatas estaban inicialmente pensadas para acompañar carnes, también las puedes preparar pensando en pescados, por ejemplo para un salmón las puedes incluir pero quitando el ajo y el romero.
Si además tienes una carne roja más compacta, puedes prepararlas con tomillo, clavo y pimienta negra.
Otra manera es preparar las patatas es con trozos de jamón serrano, bacon o pimiento rojo en cada corte, resulta un sabor muy distinto, aunque se trata más bien si quieres que el plato principal sea la patata y como guarnición acompañarla de zanahorias o algunas verduras cocidas al vapor.
Por último, si quieres ver como preparar las patatas hassselback, aquí tienes un vídeo donde Antonio Bru está en el programa Miel sobre Hojuelas de la Televisión autonómica de Castilla la Mancha, junto a Alfonso Hevia, y donde las cocinó para acompañar un Codillo of the house [miabuelareme.blogspot.com.es/2012/12/codillo-of-house.html].
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