Este es el segundo concurso al que me presento. La verdad es que no me iba a presentar a ninguno por falta de tiempo pero cuando vi el del hospital de Elda no me pude negar así que ya tenía que participar también en este que me gustaba mucho y más tarde tendré que participar en el de Carmen. Un mes muy ajetreado pero que intentaré llegar a todos.
A partir de mañana estaré unos días en la aldea así que hasta la vuelta no podré visitaros como suelo hacer. Aquí os dejo con esta rica receta que espero sea de vuestro gusto.
Con esta receta participo en el concurso del primer cumpleblog del blog Manzana y canela
Y como siempre, he querido optar por una receta ligera y baja en grasas para que a mi marido le siente bien, espero que os guste.
Estamos en octubre y es tiempo de setas. Y hasta que no vaya al monte en la aldea y recoja algunas me conformo con estas tan buenas que compro en la tienda de nuestra querida amiga bloguera Paloma. Están deshidratados y solo ha que ponerlos en agua quince minutos y los tendremos listos para añadirlos a cualquier guiso.
INGREDIENTES
-1/2 cebolla
-tres tomates medianos
-dos dientes de ajo
-unas setas “trompetas de la muerte”
-un puerro
-una zanahoria mediana
-medio vaso tamaño agua de vino blanco
-queso curado rallado
-perejil picado
-aceite de oliva y sal
PREPARACIÓN
Estas son las trompetas de la muerte. Es una seta con un sabor intenso y al mismo tiempo muy suave.
Lo primero es poner las setas a remojo en un cuenco con agua y dejarlas unos quince minutos para que se hidraten.
Mientras, en una sartén mediana ponemos unas cinco cucharadas de aceite a calentar en el fuego mediano. Cuando esté caliente ponemos la cebolla, el puerro y los ajos todo bien picadito y bien fino.
Dejamos que se sofría todo junto a fuego lento unos diez minutos para que ablande bien la zanahoria. Ahora vamos pelando los tomates y picándolos en taquitos pequeños.
Vamos moviendo el sofrito de vez en cuando para que no se tueste. Pasados diez minutos subimos un poco el fuego, añadimos el vino blanco, movemos y dejamos que reduzca. Sacamos las setas del agua y las escurrimos con las manos. En la tabla de madera las partimos en trozos que no sean muy grandes y las añadimos al sofrito.
Damos unas vueltas y añadimos el tomate.
Ponemos sal al conjunto, movemos y tapamos dejando que se haga todo junto unos veinticinco minutos. Primero lo tendremos un poco más fuerte y luego después de diez minutos bajamos el fuego y lo dejamos cocer al mínimo. Y mientras se hace el refrito cogemos tres patatas medianas, las pinchamos con un cuchillo afilado por varias partes y lo llevamos al microondas. Las cocemos a máxima potencia durante ocho minutos. Las sacamos con cuidado que queman mucho.
Las dejamos templar un poco, las pelamos y las cortamos por la mitad con cuidado. Las vaciamos un poco y las disponemos en una fuente resistente para horno.
Las salamos ligeramente por dentro y por fuera. Cuando hayan transcurrido los veinticinco minutos y esté el refrito hecho ponemos el queso curado rallado y perejil picado y removemos bien para que quede muy bien mezclado.
Rellenamos las patatas. Echamos en el fondo de la fuente un chorrito de aceite de oliva. Con la patata sobrante de vaciar las patatas junto con un poquito de relleno que ha sobrado he improvisado unas bolitas que también he añadido a la fuente para que se horneen al mismo tiempo. También se pueden rebozar en harina, huevo y pan rallado y freírlas.
Encendemos el horno a 180º con calor arriba y abajo y horneamos en la rejilla del medio otros veinticinco minutos.
Servir recién horneadas con unas bolitas y acompañar con una buena ensalada.