Autor: Paul AusterAño: 2013País: USAGénero: guiones y entrevistasEditorial: Booket
Esta recopilación de los tres guiones realizados por Paul Auster, es también un acercamiento a su breve incursión en la dirección cinematográfica, algunas entrevistas y notas de producción, en las que reconocemos la lucidez de este mítico escritor estadounidense , las complejidades de la realización y un gran número de anécdotas, que sí bien raras veces se van a ver reflejadas en los guiones, si quedan cómo testimonio de ese extraño y costoso sueño que es el cine. Para Auster, el cine, nunca fue algo ajeno, siempre ha reconocido su cercanía con este forma de narrar en imágenes, pero también entendemos, que la dirección fue algo azaroso, una casualidad, que se vio bien compensada con un trabajos como Smoke de Wayne Wang y Lulu on the Bridge, donde, estuvo sólo en la dirección.Un libro que vale la pena revisar, no sólo por lo guiones, sino por esas particularidades de Auster, que como escritor, se se pueden ver reflejadas, convertidas en imágenes en movimiento. Algunas notas tomadas del libro:Es como volver a empezar desde el principio, empiezas con el guion, que establece una cierta idea de lo que debe ser la película, luego ruedas el guion y las cosa empiezan a cambiar, las interpretaciones de los actores resaltan diferentes sentidos, diferentes matices, se pierden cosas, se encentran otras, luego entras en la sala de montaje y tratas de casar el guion con las interpretaciones. A veces ambas cosas se funden muy armoniosamente, otras veces no, y eso puede ser muy irritante, tienes el metraje que tienes, y eso limita las posibilidades, eres como un novelista tratando de revisar su libro, pero el cincuenta por ciento de las palabras no están a tu alcance.
De alguna de las entrevistas
....probablemente tenga usted razón. siempre he pensado que era una comedia (sobre Smoke), pero en el sentido clásico del término, en el sentido de que todos los personajes de la historia están un poco mejor al final que al principio, no quiero ponerme demasiado ampuloso pero cuando uno piensa en la diferencia entre la comedia y la tragedias de Shakespeare, no está tanto en el material de las obras como en la forma en que se resuelven los conflicto.Una de las conversación de Blue in the Face, en la que participa Jim Jarmush como Bob:
Y otra cosa del cine que me parece verdaderamente rara,...es en las películas de guerra...los nazis de la películas ....¿por qué fuman siempre de una manera tan rara....así? (se mete el cigarrillo entre el tecer y cuarto dedo y finge quemar a AUGGIE. luego se pone el cigarrillo entre el pulgar y el índice y guiña un ojo) ya, tenemos manera de hacerte hablarr, AUGGIE. ¿es que la amenaza de una quemadura es..torturar? o dicen esto: ya, nosotros sabemos quien erres, hemos visto lo que hacías. (fundido) pero lo jodido es que ahora vas a Hollywood....ellos nos engancharon al tabaco, nos enseñaron todo ese glamour...y ahora vas allí y no puedes fumar en ninguna parte. Fumas, enciendes un cigarrillo después de una comida en un restaurante, y vienen (imitando una voz puritana) "lo siento, señor, fumar en los restaurantes está prohibido por ley". Qué me dice de eso? ellos nos iniciaron ¿entiendes?Otra de las entrevistas: …pues porque me parecía correcto, porque sentí que era el justo. Los thrillers se parecen mucho a los sueños. Cuando les quitas los detalles superficiales, comienzan a funcionar como metáforas de nuestro subconsciente. Individuos sin rostro que te persiguen por las calles oscuras, solitarias. Hombres que penden de los aleros de los edificios, temor y peligro, riesgo, las contingencias de la vida y la muerte.La pregunta de la entrevistadora: Eugene Lourie, el famoso director artístico francés, describió la escenografía como el arte " no de crear escenarios, sino de relacionarlos con presencias vivas". Está usted de acuerdo con semejante definición?