Revista Cine
Hablar de una película de Michael Haneke me parece un poco complicado. Me da la sensación de que siempre me voy a dejar algo que decir o que hay muchas cosas que no he visto. Pero, puedo estar mucho tiempo hablando de las que he visto, sobretodo de Funny Games. Pero ya hablaré de ella en otra ocasión, porque ahora tengo reciente La cinta blanca y sigo dándole vueltas.
Lo que cuenta, y lo que no cuenta, es terrible. Decía Light Yagami que el mundo estaba podrido. No sé si el mundo en gran parte lo está, pero el pequeño pueblo alemán que nos enseña Haneke lo está Del todo. Pero al observar ciertos comportamientos, no te extrañas de que esa putefracción se extienda, es demasiado tarde para amputarla. Es más, se contagia, se transmite de unos a otros.
Y eso que Haneke, para variar, se dedica más a sugerir que a enseñar. Y cuando enseña, a mí al menos, me dio la sensación de que eran pequeñas cosas, que escondía mucho más y que no sé si es peor la sensación de imaginar el día a día en un lugar así o que me hubiera enseñado más detalles. De todas maneras, los detalles son bastante claros. Es simplemente horrible el hacerle creer a un niño de...¿cuánto? Más de diez años, supongo, pero menos de 13 ó 14. Hacerle creer a un niño que no tiene ningún tipo de información al respecto, que si se masturba más veces, morirá. De forma terrible además: dejando de comer, convirtiéndose su cuerpo en pústulas y con aspecto de anciano. Hacérselo creer con un ejemplo real, para que se lo crea, y por la noche, hacerle que duerma con las manos atadas a la cama. El agobio que me entra con el hecho de pensar la presión de creerse la historia de la muerte y el dormir atado todas las noches es insoportable.Con ese tipo de detalles, otros más explícitos, te enseña el terror. Y no solo eso. Te enseña las consecuencias. Te enseña un pueblo hipócrita, que no falta a su cita en la misa, pero que luego castiga, pega, maltrata, amenaza, abusa, reprime, que vive con miedo y un largo etcétera al resto. A los más débiles, siempre. Niños y mujeres, sobretodo; se asume el papel de autoridad, de autoridad castigadora y represiva, se les humilla, se les hace sentir como basura, se les crea un sentimiento de culpabilidad horrible por hechos tan simples como estar hablando alto en clase antes de que llegue el profesor. De un trato así, no puede salir nada bueno.
La historia de un pueblo, de su gente; en el que parece que solo se salva los pocos que aún pueden conservar la inocencia y los que no se han criado allí. Y no me extraña. Y lo difícil que es mantener la inocencia en un sitio así...Una cinta blanca en el brazo no es suficiente.
Por cierto, las actuaciones me parecen geniales, y destaco a los niños. Impresionante. Además, Haneke mete muchos primeros planos, que a mí me encantaron porque joder, hay que ver cómo se lucen. Y qué distintos estaban en Cannes, oye, qué curioso...
Lo malo es que no creo que pueda gustar a todo el mundo, o que pueda gustar por igual. Y no lo digo porque sea una película difícil de comprender y que requiera un alto nivel de pedantería gafapasta e intelectualidad, como seguro que muchos dicen (se dicen tantas gilipolleces...), sino simplemente porque hay pocas cosas que se digan directamente. Ya lo he dicho, sugiere mucho. Sino estás metido en la película, y los detalles no te dicen nada (a mí hay cosas tan simples como una frase al principio, de una de las niñas, regañando a su hermano por no saludar al profesor y reprocharle la falta de modales, que se me han quedado), te puede parecer una mierda. Por eso, y porque es bastante lenta, la máxima pega que le saco yo. No me pareció aburrida, porque el sentimiento de mal rollo y de que pasaba e iba a pasar algo malo, no se me quitó del cuerpo desde el principio de la película, pero sí es lenta y dura más de dos horas. Así que, como no te llegue lo que se cuenta, te puedes aburrir.
Yo con semejante panorama, lo dicho, no podía aburrirme. Ah, y hubo un momento de increíble angustia y que lo pasé francamente mal, en el que Haneke aleja la cámara y enfoca otra cosa. Qué bien se te da, cabrón. En fin, me gustó, podría haberlo hecho más tal vez, pero es brutal lo que cuenta.
**********SPOILER SOBRE EL FINAL**************
Qué hijo de puta eres, Haneke. Con todo mi cariño. Cómo sabía que acabarías la película así, cómo te gusta jugar con nosotros. Pero en fin, yo no creo que se necesitara un final cerrado. Dejas bastante claro que los niños son los causantes. Es más, los dos niños afectados, son de los más pequeños del pueblo, así que los niños mayores se ven en el derecho a castigarlos. "Por los pecados de sus padres", dicen en la nota a la agresión al niño de síndrome de Down. Ellos no pueden castigar a los padres, porque son los débiles. En cambio, si van contra sus hijos, ellos son los fuertes. Y de todas maneras, aunque no fueran, ellos los culpables ¿qué importa? En ese sitio, podría haber sido casi cualquiera. Y que seas consciente de eso, es mejor que un final explicativo que en realidad es innecesario.
Lo que cuenta, y lo que no cuenta, es terrible. Decía Light Yagami que el mundo estaba podrido. No sé si el mundo en gran parte lo está, pero el pequeño pueblo alemán que nos enseña Haneke lo está Del todo. Pero al observar ciertos comportamientos, no te extrañas de que esa putefracción se extienda, es demasiado tarde para amputarla. Es más, se contagia, se transmite de unos a otros.
Y eso que Haneke, para variar, se dedica más a sugerir que a enseñar. Y cuando enseña, a mí al menos, me dio la sensación de que eran pequeñas cosas, que escondía mucho más y que no sé si es peor la sensación de imaginar el día a día en un lugar así o que me hubiera enseñado más detalles. De todas maneras, los detalles son bastante claros. Es simplemente horrible el hacerle creer a un niño de...¿cuánto? Más de diez años, supongo, pero menos de 13 ó 14. Hacerle creer a un niño que no tiene ningún tipo de información al respecto, que si se masturba más veces, morirá. De forma terrible además: dejando de comer, convirtiéndose su cuerpo en pústulas y con aspecto de anciano. Hacérselo creer con un ejemplo real, para que se lo crea, y por la noche, hacerle que duerma con las manos atadas a la cama. El agobio que me entra con el hecho de pensar la presión de creerse la historia de la muerte y el dormir atado todas las noches es insoportable.Con ese tipo de detalles, otros más explícitos, te enseña el terror. Y no solo eso. Te enseña las consecuencias. Te enseña un pueblo hipócrita, que no falta a su cita en la misa, pero que luego castiga, pega, maltrata, amenaza, abusa, reprime, que vive con miedo y un largo etcétera al resto. A los más débiles, siempre. Niños y mujeres, sobretodo; se asume el papel de autoridad, de autoridad castigadora y represiva, se les humilla, se les hace sentir como basura, se les crea un sentimiento de culpabilidad horrible por hechos tan simples como estar hablando alto en clase antes de que llegue el profesor. De un trato así, no puede salir nada bueno.
La historia de un pueblo, de su gente; en el que parece que solo se salva los pocos que aún pueden conservar la inocencia y los que no se han criado allí. Y no me extraña. Y lo difícil que es mantener la inocencia en un sitio así...Una cinta blanca en el brazo no es suficiente.
Por cierto, las actuaciones me parecen geniales, y destaco a los niños. Impresionante. Además, Haneke mete muchos primeros planos, que a mí me encantaron porque joder, hay que ver cómo se lucen. Y qué distintos estaban en Cannes, oye, qué curioso...
Lo malo es que no creo que pueda gustar a todo el mundo, o que pueda gustar por igual. Y no lo digo porque sea una película difícil de comprender y que requiera un alto nivel de pedantería gafapasta e intelectualidad, como seguro que muchos dicen (se dicen tantas gilipolleces...), sino simplemente porque hay pocas cosas que se digan directamente. Ya lo he dicho, sugiere mucho. Sino estás metido en la película, y los detalles no te dicen nada (a mí hay cosas tan simples como una frase al principio, de una de las niñas, regañando a su hermano por no saludar al profesor y reprocharle la falta de modales, que se me han quedado), te puede parecer una mierda. Por eso, y porque es bastante lenta, la máxima pega que le saco yo. No me pareció aburrida, porque el sentimiento de mal rollo y de que pasaba e iba a pasar algo malo, no se me quitó del cuerpo desde el principio de la película, pero sí es lenta y dura más de dos horas. Así que, como no te llegue lo que se cuenta, te puedes aburrir.
Yo con semejante panorama, lo dicho, no podía aburrirme. Ah, y hubo un momento de increíble angustia y que lo pasé francamente mal, en el que Haneke aleja la cámara y enfoca otra cosa. Qué bien se te da, cabrón. En fin, me gustó, podría haberlo hecho más tal vez, pero es brutal lo que cuenta.
**********SPOILER SOBRE EL FINAL**************
Qué hijo de puta eres, Haneke. Con todo mi cariño. Cómo sabía que acabarías la película así, cómo te gusta jugar con nosotros. Pero en fin, yo no creo que se necesitara un final cerrado. Dejas bastante claro que los niños son los causantes. Es más, los dos niños afectados, son de los más pequeños del pueblo, así que los niños mayores se ven en el derecho a castigarlos. "Por los pecados de sus padres", dicen en la nota a la agresión al niño de síndrome de Down. Ellos no pueden castigar a los padres, porque son los débiles. En cambio, si van contra sus hijos, ellos son los fuertes. Y de todas maneras, aunque no fueran, ellos los culpables ¿qué importa? En ese sitio, podría haber sido casi cualquiera. Y que seas consciente de eso, es mejor que un final explicativo que en realidad es innecesario.