Pensar en 3D

El cerebro piensa en 3D. Realmente las lineas curvas son totalmente rectas.

Antes de que podamos hablar de lo que significa pensar en tres dimensiones consideremos lo que significa pensar en una forma bidimensional. Cuando se piensa en dos dimensiones, se piensa en cómo ir de A a B, un pensamiento lineal donde una cosa se relaciona, es causada por o es asociada la una con la otra o viceversa. Es verdad que existe esta relación exclusiva entre estos dos elementos pero no se consideran otros factores lo suficientemente importantes que son parte de una ecuación más grande.
En este modelo de dos dimensiones de pensamiento lineal la gente ve una cosa relacionada con otra cosa y nada más. Un ejemplo en el que vemos a menudo una relación bidimensional natural es en los deportes. En los deportes un equipo juega contra otro equipo, un boxeador lucha contra otro boxeador. En este ejemplo, la relación uno a uno es claro ver. Nunca vemos tres boxeadores o un juego entre tres equipos al mismo tiempo. La mente humana parece entender mejor y reconocer el dualismo en el contexto de uno-a-uno. La relación uno a uno es necesaria para la integridad del deporte y el conocimiento de este dualismo es esencial para disfrutar el deporte. En el deporte como en la vida, y sólo después de dar un paso atrás y se comienza a ver la imagen más grande (es decir, los playoffs) usted comienza a pensar de una forma dimensional superior. La mayor visión de conjunto permite la consideración de más de dos equipos.
Del mismo modo, los principales medios de comunicación occidentales que auspician el paradigma de la propaganda política que existe en la actualidad, opera casi exclusivamente en la lógica de dos dimensiones. Republicano o demócrata, cristiano o musulmán, EE.UU. frente a quienquiera que digan que son terroristas (ISIS, Al Qaeda), la guerra entre este país y aquel país, capitalismo versus socialismo. Ejemplos de este “deporte” uno a uno, lineal, A o B, la estructura de dos dimensiones en todas las cuestiones políticas. Los servicios secretos, los grandes medios engañosos y los políticos utilizan el pensamiento bidimensional -como ingenuos, como un arma poderosa para engañar y mantener a las masas dormidas en la matriz de la mentira.
Así es, esta idea demasiado simplista de pensar en dos dimensiones es a menudo pasada por alto por la mayoría y, en silencio, juega un papel muy importante en el control de la mente y del engaño de las masas. Al igual que la ida y vuelta del péndulo de un especialista en hipnosis o una multitud viendo intensamente un buen partido de tenis, el modelo de dos dimensiones ofrece la perfecta distracción de otras realidades. El sistema de control sabe que el mantenimiento de la relación de dos dimensiones en las narrativas políticas relacionadas garantiza importantes oportunidades para introducir distracciones y engaños hacia al público en general.
Este pensamiento bidimensional es una táctica de propaganda y es la herramienta perfecta de engaño, no tanto por lo que hace, sino por lo que no hace. Inhibe las formas superiores de pensamiento, limita el alcance de un tema y limita las dimensiones de consideración tomadas en el tema. Si lo comparamos con la medicina, se podría decir que el pensamiento de dos dimensiones es un tipo de asesino silencioso. Pensando en sólo dos dimensiones, es a la mente, el sentido de la comprensión, el pensamiento crítico y el desarrollo intelectual, lo que sería un débil sistema inmunológico al cuerpo humano. En ambos casos se está corrompiendo el sistema- ya sea su sentido de la comprensión y el pensamiento crítico o su salud- para ser atacado y debilitado.
Ahora que hemos considerado lo que el pensamiento de dos dimensiones es, consideremos lo que pensar en tres dimensiones se parece. Sugerimos el ejemplo de los deportes donde el panorama general de playoffs representa una visión más tridimensional de las cosas, en el caso de la guerra contra el terrorismo por ejemplo- podemos aplicar el pensamiento tridimensional, considerando a ISIS no solo como terroristas que luchan contra los Estados Unidos o el Occidente sino, demos un paso atrás y ver que podríamos estar ganando de la imagen dualista de dos dimensiones. Pregúntate a ti mismo, ¿hay realmente un tercero mucho más importante detrás de este dualismo? ¿Un titiritero dirige el espectáculo? ¿Elementos tirando claramente de la cadena con la intención deliberada de dejar que el doble juego siga?
En lugar de ver los republicanos contra los demócratas con un pensamiento lineal, con tres dimensiones podemos volver a dar un paso atrás y tratar de ver una imagen mayor. El  pensamiento tridimensional nos permite ver y conciliar que la vida en Estados Unidos no cambia según un lado u otro, la misma agenda política nacional y extranjera, exacta se lleva a cabo de cualquier manera con poca o ninguna diferencia.
Recordemos el asesinato del presidente John F. Kennedy y cómo bidimensional pensamiento fue aplicado como una herramienta para encubrir este asesinato. A todo el mundo se le hizo creer que Lee Harvey Oswald actuó solo; (por coincidencia) decidió disparar y asesinar al presidente. La CIA y el objetivo principal de los grandes medios de comunicación tras el asesinato de JFK fue mantener a la mente del público en un estado de dos dimensiones. La CIA incluso sacó su documento 1035-960 (documento original aquí) en 1967 tomando grandes medidas para castigar a cualquiera que se atreviera a pensar en tres dimensiones fuera de la caja creada por los medios tradicionales con respecto a quien asesinó a JFK.
El pensamiento tridimensional no se detiene en la relación uno-a-uno sino que trata de identificar la mayor imagen, más real y abrazar la realidad de cómo funciona realmente la naturaleza. Sostengo que ver el cuadro mayor de tres dimensiones es una obligación natural de todo ser humano. Usted tiene la obligación de ver la verdad, que es la voluntad de ver la totalidad y la realidad del mundo físico, mental y espiritual que nos rodea. Esto implica el quitar el velo de ilusión de que las  cosas ocurren por casualidad de una manera sencilla en dos dimensiones.
Este segundo factor que llamo "teoría de la coincidencia" es otra capa de engaño sobre la humanidad que todavía muchos tienen. El fenómeno de la "teoría de la coincidencia" no es un sistema de creencias, sino un trastorno mental general donde los humanos consciente o inconscientemente atribuyen a los eventos diarios como ocurrencias casuales espontáneas. Las personas afectadas por este trastorno quieren creer que los acontecimientos políticos, nacionales y globales diarios suceden por casualidad. Quieren creer esta aleatoriedad que están dispuestos a burlarse y ridiculizar a cualquiera que no piense de esta manera, tachándolo como un "lunático" o "teórico de la conspiración”. La idea de que los acontecimientos en nuestra vida diaria están realmente organizados se resiste. La idea de que los países y los políticos en realidad planean (o conspiran) en forma organizada a fin de darse a sí mismos la mejor oportunidad para lograr sus objetivos políticos (a nivel nacional o en el extranjero) es reprimida artificialmente por los que creen que los acontecimientos políticos suceden por casualidad; se descartan, incluso es categorizado como conspiraciones salvajes a pesar de toda la lógica y razón si no apunta al hecho de que no hay mejor forma y más eficiente que la ejecutada por el gobierno.
Esta teoría de la coincidencia trabaja mano a mano con el pensamiento lineal simple de dos dimensiones que hemos estado discutiendo. Con el fin de seguir ignorando la mayor imagen - que otras entidades se encuentran constantemente en juego detrás de las escenas de los eventos nacionales y mundiales políticos - uno debe casi seguro creer que todos estos eventos están sucediendo por casualidad. Este es el perfil mental de los que nos referimos como perdidos en la matriz, ovejas ciegas, ignorantes o lavados de cerebro.
El pensamiento tridimensional, por otro lado ofrece la libertad de la limitada linealidad bidimensional (basada en la teoría de la coincidencia). Simplemente aprendiendo a pensar en 3-D, usted puede fácilmente comenzar a ver la imagen mayor en todos los acontecimientos políticos, rompiendo así las cadenas que atan su mente, paralizar el pensamiento crítico y limitar el alcance de su percepción y comprensión respecto a los acontecimientos del mundo y la política.
La exposición de la propaganda puede tomar un tiempo si intenta desmontarla pieza por pieza y que es parte de lo que intento hacer en este blog. Hay muchas capas en la propaganda, cómo funciona y cómo se aplican eficazmente y esto no es más que una pieza del rompecabezas. La Propaganda eficaz se basa en el embrutecimiento de la humanidad, la eliminación del pensamiento crítico, simplificando demasiado las percepciones en el contexto político (derecha o izquierda), apela a una menor emoción del cerebro y un mayor estímulo físico y, el bombardeo repetido de estas tácticas con la corriente principal diaria de mentiras de los medios.
Es importante entender el embrutecimiento de la humanidad a fin de comprender cómo revertir este efecto. Tridimensional, el pensamiento elevado mejora la inteligencia, la intuición y la sabiduría de la humanidad. El pensamiento crítico y de mente abierta puede y va a permitirle ver cosas que nunca antes había visto.
Recuerde que toda la política se presente, por diseño, en tres dimensiones en la naturaleza. Los políticos siempre manipulan escenarios bidimensionales detrás de las escenas en busca de metas personales y, a menudo expresadas abiertamente. La manipulación de la información es el punto central de la política. Nada de esto debería ser extraño o sorprendente para nadie.
Es hora de superar la realidad del titiritero y la falsa bidimensionalidad, basada en el dualismo que muestran los principales medios de comunicación y los políticos. Yo creo que la gente puede empezar a pensar en tres dimensiones y empezar a buscar el titiritero en lugar de asumir que el titiritero de alguna manera no existe. Este único ejercicio por sí solo, creo que es suficiente para despertar a la humanidad y restaurar el mundo a un estado libre y el pensamiento crítico que mantendrá a los globalistas en jaque y exigirles responsabilidad por sus crímenes.