Pepinos malhablados

La aparente contaminación de los pepinos españoles, lanzada de manera irreflexiva y sin comprobación por los responsables de sanidad de Alemania, Austria y otros países ha generado un oleada de desconfianza no solo en el saludable pepino sino en otros vegetales españoles. El cierre de las fronteras a los productos españoles está generando no pocas pérdidas a un sector muy dependiente de la exportación. Ahora que parece que la causa de las intoxicaciónes por la bacteria Escherichia Coli no es atribuible a los pepinos españoles: ¿Quien pagará el daño hecho?, ¿Quién asumirá las pérdidas evidentes en el sector agrícola? ¿Quien asume las pérdidas no tan claras pero patentes en la credibilidad y calidad de un producto de total confianza?Es importante hacer constar que el manejo de la información y la responsabilidad de los gobernantes en cada caso de salud pública son muy importantes porque pueden hundir de manera absolutamente injustificada a un sector de un país muy necesitado de trabajo y confianza.Más de 200 millones de euros a la semana, un mercado hundido por el exceso de oferta y una desconfianza a los productos que se ha transmitido también al mercado local dan un panorama poco esclarecido de un perjuicio cantado en un sector del que viven 300.000 personas. Ahora se solicitarán ayudas, se darán compensaciones o indemnizaciones pero la sombra de la duda, "Difama que algo queda", quedará tras el pepino español y, por ende, tras todos los productos agrícolas españoles. El esfuerzo de calidad, inversión, logística y precio de los productores españoles ha sido golpeado de manera fiera. El sector se recuperará pero notará este daño que de manera involuntaria se ha realizado. Es importante que los políticos y más los que tienen responsabilidad de gobierno conozcan esta capacidad de hundir un sector por unas declaraciones hechas al albur del primer dato.Información, responsabilidad y daños en Recuerdos del día de mañana.PD: Por su sabor, su calidad y su factura yo seguiré tomando pepinos. Ni el miedo ni la mala gestión de otros me harán renunciar a mi gazpacho veraniego.Despierte el alma dormida, avive el seso e despierte. A fin de cuenta sino pensamos y vivimos para que queremos estar. Los pensamientos de hoy son recuerdos del mañana que tenemos hoy.