PHE14: el recorrido del Silencio

Cada año, desde el 2004, he podido organizarme para coincidir en Madrid durante PhotoEspaña; este año he vivido este acontecimiento un poquito más desde dentro, por haber sido seleccionado para el visionado de portfolios en Descubrimientos. Por ejemplo, estaba invitado a la inauguración oficial…

El tema con el cual me he presentado a Descubrimientos trataba un aspecto del Silencio y por lo tanto he pensado en planificar las visitas a las diferentes exposiciones, teniendo como hilo conductor el tema del Silencio. Lo que os propongo en este post, es un recorrido en los diferentes Silencios encontrados en PHE14.

Existe una tendencia más o menos incipiente en la fotografía más actual, en la cual las imágenes se “desnudan” de la presencia humana o esta se representa solo indirectamente, a través de las huellas que las personas dejan en los lugares. Quizás esta tendencia es pareja a la necesidad de huir de la velocidad con la cual vivimos y de la abundancia de información que estamos obligados a procesar constantemente. Es una búsqueda de la sencillez, de lo esencial, de la interiorización; de un tiempo pautado; de ausencia de historias o de rastros muy ligeros de ellas… algo parecido a la apoteósica (para mi) primera página de Océano Mar de Baricco.

Hotel de las Letras. Este hotel, renovado recientemente, ofrece un espacio bar “muy urban”, un excelente restaurante de cocina sofisticada y de calidad y una biblioteca. En este último espacio estaba la exposición La mirada transeúnte (imágenes de la colección BAUZA) que presenta unos paisajes que se alejan del aspecto descriptivo y que exploran la línea que une el espacio a las emociones.

Galería Helga de Alvear. Playtime es un trabajo de Isaac Julien sobre el “capital”, usando dos ciudades emblemáticas: Reykjavik, donde se evidenció por la primera vez en toda su crueldad la crisis que padecemos; el único sitio en el cual los políticos han tenido el coraje de ir en contra de las Finanzas y de los especuladores, procesando los culpables de la codicia. Dubai que representa uno de los nuevos centros del capital. En cada ciudad, el autor ha elegido un protagonista; en el caso de Reykjavik, un artista; en el caso de Dubai una trabajadora doméstica asiática. En ambos casos, los lugares en los cuales están ambientados los retratos, parecen “comerse” a los protagonistas; en el caso del artista en Reykjavik, su estado de total precariedad, parece tener reflejos en unos espacios de una Islandia invernal. En el caso de la trabajadora doméstica en Dubai, su soledad forzada, la hace vivir en una jaula dorada de la cual sueña con escaparse y en la cual tendrá irremediablemente que aprender a sobrevivir.

Espacio Fundación Telefónica. La sombra y el fotógrafo es una retrospectiva dedicada a Antoni Arissa (para mi, la mejor de las exposiciones de PHE14) en la cual se encuentran diferentes tipos de silencio: el silencio de las sombras y de la intangibilidad; el silencio de las cosas de casa, en ausencia de sus dueños. Aunque el primer tipo de silencio nos ofrece unas imágenes de altísimo valor emocional, es el segundo tipo de silencio que me ha llamado la atención porque visualiza un momento del día en el cual me identifico totalmente. Se trata de la hora de la siesta, durante la cual la casa conquista una paz precaria pero absoluta y en la cual, quien está despierto, se envuelve de un silencio satisfactorio lleno de una sensación de que “todo está en orden” y de tiempos lentos en los cuales somos capaces de adelantar los acontecimientos que están por llegar. Me imagino el fotógrafo vagando en la casa en penumbra, buscando objetos cotidianos y sus sombras que asumen el papel de testigos de esta plenitud interior.

Galería Marita Segovia. Plantas/Flores/Frutas. Cuando entré en esta galería, tuve un momento de desconcierto al ver que estaba en una tienda repletas de objetos de lo más disparatados; parecía la versión “pija” de una de las tiendas del Rastro. Viéndome tan parado, me explicaron con amabilidad que la galería estaba…al fondo..y allí me encontré el mundo vegetal de Pilar Pequeño, unmundo de silencio, de no-tiempo, de placidez, de bienestar. Sus fotografías muy pictóricas, están llenas de armonía, de ternura, de fragilidad y de efímero; dejan intuir la plenitud que debía sentir la autora cuando las creaba. La misma plenitud que he probado cuando estaba sumergido en aquella Naturaleza congelada, escenario de mi serie Ikebana. Por esto quizás he disfrutado especialmente con cada una de las imágenes expuestas; en la misma sala había además esculturas vegetales de un realismo impresionante, hechas en hierro pintado de Rafael Muyor.

La Lonja en Zaragoza – Retrospectiva de Rafael Sanz Lobato. Este año, una de las sedes de PHE ha sido también Zaragoza. En este sitio expositivo del Ayuntamiento de la ciudad en la plaza del Pilar, están expuestas (hasta el 7 de Septiembre) las fotografías de toda una carrera de Rafael Sanz Lobato…y aquí también me encontré con el Silencio…lo encontré en los bodegones en ByN de objetos comunes encontrados y en los cuales es evidente el paso del tiempo y que allí asumen una belleza inesperada y llevan a imaginar el uso que tuvieron. El Silencio de las cosas… el autor explica en un video que buscaba para estas imágenes, una luz tan tenue que cuando alguien hubiera visto los negativos, tenía que pensar: “de aquí no se puede sacar nada”. El Silencio se percibe pero no se oye; los bodegones de Lobato también: se sienten pero no se miran.

La semana que viene el post estará dedicado a los ganadores del mes de Junio de la Photo of the Month (PoM)…