Ingredientes:
Para el relleno:
- dos latas de pimientos del piquillo- 500g de bacalao- media cebolla- una patata mediana
Para la salsa:
- dos pimientos del piquillo- 200ml de nata para cocinar- sal - pimienta
Preparación:
Limpiamos bien los pimientos que suelen tener restos de semillas en su interior asegurándonos que no quede ninguna.Pelamos la patata y la cebolla y las cortamos en trozos . Ponemos a calentar un poco de agua en una olla y cuando rompa a hervir echamos la patata y la cebolla.Dejamos cocer unos diez minutos y añadimos el bacalao desalado y sin espinas.Esperamos otros diez minutos -el tiempo dependerá del grosor del bacalao- y retiramos del fuego.Escurrimos el agua y en un plato machacamos la cebolla, la patata y el bacalao con la ayuda de un tenedor hasta que quede una pasta con todos los ingredientes integrados.Con un cuchara de postre rellenamos los pimientos y reservamos.Ahora vamos a preparar la salsa con la que acompañaremos nuestros pimientos: en el vaso de la batidora colocamos los pimientos y la nata, trituramos y ponemos la mezcla en un cazo a fuego medio con un pellizco de sal y un poco de pimienta negra recién molida.Esperamos durante unos minutos hasta que la salsa espese un poco.Para la presentación ponemos un poco de salsa de pimientos en el fondo de una fuente y los pimientos rellenos alrededor.El resto de la salsa la servimos en una salsera.Curiosidades:
El bacalao lo podéis comprar salado para lo cual tenéis que ponerlo en remojo en agua el día anterior. Yo para esta preparación utilizo siempre bacalao envasado que se encuentra en la sección de congelados del súper. Ya viene desalado, sólo tenéis que descongelarlo en la nevera la noche anterior. Además suele venir sin espinas por lo que resulta muy cómodo.Para el relleno no es necesario añadir sal, la sal que retiene el bacalao es suficiente.Tanto los pimientos como la salsa los podéis dejar preparados con antelación. En el momento calentáis la salsa, colocáis los pimientos con la salsa en el fondo de la fuente de presentación y lo calentáis unos segundos en el micro.Yo suelo añadir un chorrito de aceite de oliva virgen por encima de los pimientos justo antes de llevarlos a la mesa, les da un brillo especial.También podéis llevar los pimientos en tupper a la oficina y calentarlos en el micro.
Esta receta es apta para celíacos.
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