Ya era tiempo. Los nuevos gobiernos de la Zona Metropolitana de Guadalajara lanzaron un plan contra los anuncios espectaculares, que no sólo atentan contra la inteligencia y salud mental de propios y extraños, sino que además sus promotores se dan el lujo de violar leyes y reglamentos en beneficio particular.
La idea es atacar puntos emblemáticos como son La Minerva, el Mercado Corona, la Plaza de Toros, el Estadio de Jalisco y el Puente Matute Remus, pero yo agregaría el tramo de carretera al Aeropuerto de Guadalajara, que involucra a varios municipios, lleno también de espectaculares realmente espantosos, lo cual da muy mala imagen a los turistas que llegan o salen de esta ciudad, y en el mismo sentido, añado los de zonas turísticas como Puerto Vallarta, que son una verdadera vergüenza.
Sucede que, según datos oficiales, hay en esta zona metropolitana más de seis mil espectaculares, en su mayoría sin permiso municipal, o sea, que ni impuestos pagan, pero además muchos promueven el alcoholismo precisamente en la vía pública, contraviniendo el programa oficial “Salvando vidas”.
“La contaminación visual es un asunto que no respeta fronteras ni límites municipales. Los tapatíos tenemos derecho a un medio ambiente sano”, dijo el presidente de Guadalajara al anunciar este programa, que desde luego merece todo el apoyo público.
De acuerdo con este plan, los nuevos gobiernos de la zona metropolitana tendrán en lo sucesivo especial cuidado al otorgar nuevas licencias para espectaculares (al menos así lo ha ofrecido el alcalde tapatío), y por lo visto también habrán de revocar los permisos de muchos otros, además de clausurar definitivamente los que no han cumplido con los más elementales requisitos.
¡Enhorabuena!
Artículo publicado en el diario La Crónica de Hoy Jalisco en su edición del viernes 4 de diciembre de 2015.