Descubrí a Black Sabbath de manera tardía, de hecho mi primer disco de los Sabbath fue una recopilación del año 2000, un doble CD con 32 temas que me dejó, me sigue dejando, con cara de idiota preguntándome cómo me había podido estar perdiendo semejante maravilla durante tantos años. La verdad que en los años 80 el heavy anterior a 1980 para mí se reducía a Led Zeppelin y Deep Purple, del resto, claro que había oído hablar, pero jamás le presté ninguna atención. Todo empezó a cambiar en los primeros 90, por un lado gracias, como no, al advenimiento del grunge, con todas aquellas bandas entre cuyas influencias los críticos siempre metían a Black Sabbath y por otro lado, porque supongo que inevitablemente uno va aprendiendo con los años y con 20 o 21 tacos estás a tope, vas abriendo tus gustos y tienes hambre de investigar, de conocer y de descubrir otras cosas.
Y fue probablemente debido a esa ignorancia el que, entre tanto temazo potente marca de la casa, tipo “The Wizard”, “N.I.B”, “Evil Woman” o “Iron Man”, me sorprendiera hallar una pieza de evocadora belleza y cierto espíritu, entre hippy y psicodélico, como “Planet Caravan”, algo que yo consideraba en las antípodas de lo que debía ser Black Sabbath, cuando debía haber sabido que son precisamente esos pequeños detalles los que te demuestran lo buena que es una banda.
Sin embargo sé que el evocador viaje cósmico de “Planet Caravan” no deja de ser una excepción dentro del sonido de Black Sabbath y de temas como “War Pigs”, “Fairies Wear Boots” (qué bueno), “Sabbath Bloody Sabbath” o los antes citados, que son en definitiva los que han hecho grande a Black Sabbath y han cautivado a millones de aficionados a la música, yo incluido. Y ahora es donde debería empezar a repasar las entradas de Aitor o de Rockland para aprender un poco a describir el sonido de Black Sabbath… pero para qué, si ya están ellos aquí al lado y las copias nunca superan a los originales, así que me conformaré con decir que me gustan los continuos cambios de ritmo y esos riffs medio tétricos, que me gusta, aunque tampoco entiendo nada de instrumentación, la base rítmica de Black Sabbath, y ese sonido compacto y poderoso que tiene la banda, e incluso me gusta cada vez más, aunque me costó acostumbrarme, la voz de Ozzy. En resumen, que por fin puedo decir, sabiendo más o menos de lo que hablo, que me encanta Back Sabbath.
Y si antes dije que “Planet Caravan” me llamó la atención por lo inesperado, “Paranoid” fue otro de los temas que me impactaron desde la primera vez que lo escuché, supongo que porque reúne parte de lo anterior y sobre todo porque es una bomba de rock’n’roll imparable e intemporal, como demuestra este vídeo que no me canso de ver. Es algo brutal.
1. "Planet Caravan"- Black Sabbath (Paranoid, 1970)2. "Paranoid" - Black Sabbath (Paranoid, 1970)