No cabe ninguna duda, la naturaleza es sabia y ofrece un ecosistema perfecto en el que el equilibrio se respeta a rajatabla. ¡Así, por un lado, sabemos que existen insectos que pueden atacar nuestras plantas, pero también encontramos algunas especies vegetales que, de manera natural, ayudan a combatirlos. Estas son las plantas aromáticas.
Las más efectivas para terminar con las plagas en general son la lavanda, el romero, la salvia, la ruda, la menta, la albahaca, el estragón y el tomillo. Aunque para casos más específicos como erradicar a las moscas blancas puede recurrirse al ajenjo y al mismo romero, para ahuyentar a los pulgones puede plantarse taco de reina o ajo e incluso utilizarse las plantas de sésamo como excelente hormiguicida.
El secreto también estará en lograr una buena composición del jardín, ya que no todas las plantitas aromáticas son demasiado decorativas. Piense bien y trate de plantar detrás de las plantas más grandes las plantitas que crea que puedan deslucir su jardín y las más llamativas, como la lavanda, en un sector visible del mismo.