No sólo comprando una mascota se puede estimular a los niños y que aprendan a adquirir responsabilidades. Igual somos alérgicos a algún animal, tenemos un piso pequeño y no cabemos o simplemente no nos gustan. Con las plantas tus hijos también aprenderán a tener responsabilidades, a cuidarlas y a conocerlas un poco mejor.
Actualmente existen un sin fin de macetas graciosas, con caras, narices que sobresalen del tiesto y cosas así. Son macetas exclusivamente para niños, que ya vienen con la planta a punto de germinar, incluso hay algunas que la hierba que crece hace de pelo de la maceta, una auténtica monada. Enséñales a regarlas todos los días, a que las pongan donde haga el sol, y a cortarle las hojas de vez en cuando.
También se les puede enseñar a que lo hagan ellos mismos y entiendan mejor el proceso. Introduce una lenteja o guisante en un algodón húmedo y ponla en el yogur que se comieron en la merienda. Ver cómo germina les gustará mucho.
Otra cosa que se puede hacer es sembar alguna planta que de algún tipo de fruto comestible. Si tenemos jardín no hay problema, porque se pueden plantar un sin fin de cosas, pero si no lo tenemos resulta un poco más complicado. Así que intenta sembrar una tomatera, que la riegue todos los días, que la saque al sol y en definitiva que se preocupe por ella. Seguro que cuando germinen los tomates se muere de ganas por probarlos.
También se le puede inculcar el respeto por el medio ambiente. Plantar cada uno un pino en una maceta y haceros cargo de él. Podéis competir por haber a quién se le hace más grande o tiene más hojas, incluso puede ir anotando los progresos semana a semana. Explícale muy claramente que cuando se hagan mayores los tenéis que llevar al monte porque hay que dejarlo en un espacio más grande con otros arbolitos. Disfrutará mucho “liberando” su pino.
Hacer experimentos con plantas les dejará fascinados. Cortar claveles blancos e introducir el tallo en vasos con agua y tinta. Esto dejará boquiabiertos a vuestros hijos cuando vean que cambian de color. Otro experimento, pero este lleva varios días, sería cortar un agujero en una caja y plantar dentro guisantes trepadores. Al pasar un par de días los guisantes crecerán únicamente en la dirección de la luz. Con este experimento podréis explicarle la importancia de la luz para los seres vivos.
Estas son sólo algunas de las muchísimas actividades de jardinería que podéis practicar junto a vuestros hijos ¿Y tú, te animas a contarnos alguna?
Foto: Pontificia Universidad Católica de Chile
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Plantas y niños