Plata hay – lo que lo que falta es capacidad…

Gobernador - Ricardo Chavarría

Vladimir Rojas – ex consejero regional analiza las deprimentes cifras de gastos en proyectos de inversión del GRL y  gobiernos locales Que la corrupción tenga un fuerte impacto negativo sobre el desarrollo – no parece preocupar a los gobernantes de turno en un país tan venido a menos en cuestión de ética pública. Al menos así lo deja entrever desde su cuenta personal de Facebook, el ex consejero al analizar las desalentadoras cifras  de gastos en proyectos de inversión de parte del Gobierno Regional de Lima (GRL) y la Municipalidad Provincial de Cañete (MPC), además de acentuar como  la coima, el arreglo y la ignorancia en gestión retrasan que el dinero llegue a la población.Empiezo por la gestión Ricardo Chavarría –dijo – tras reiterar que de los 330 millones que tiene el GRL para obras, sólo haya comprometido 40 millones hasta el día de hoy.  “No hay gestión, así de sencillo, hay gerentes fanfarrones y acuchillando la espalda del otro. Hay, en otros, visitas a asesoría legal para que los autoricen en sacar obras con '80 mil' razones no lícitas. Hay consejeros que prefieren concursos de 12 millones, y sepultan el reclamo por el dinero retenido. Prefieren pasear, seguir sin secretario, jugar a los audios, blindar funcionarios y 'apretar' según la teoría de Arrieta", manifestó.En el que caso de la comuna provincial que lidera el alcalde Segundo Díaz, opinó y sustento que esta no se queda atrás, pues hasta hoy no se logra el aneblado despegue prometido en campaña. “Cañete, valle bendito, 126 millones retenidos en los municipios, donde sólo han gastado 14 millones. Es un terrible escenario, pero eso fue lo que elegimos, claro con las honrosas excepciones de los alcaldes de Santa Cruz de Flores, Coayllo y Cerro Azul que ocupan los primeros lugares”, continuó diciendo – tras lamentar que por ejemplo la alcaldesa de Mala - Sonia Ramos en Mala, teniendo 15 millones sólo haya gastado 1 millón. Finalmente – dijo que no sorprenda a nadie que estos hechos en los próximos meses generen el tradicional negocio de kits y justas revocatorias, y con ello la inversión pública seguirá retenida por la búsqueda del salvavidas al alcalde de su elección.