Poderosa oración celta para la felicidad y la prosperidad espiritual y materail

PODEROSA ORACIÓN CELTA PARA LA PROSPERIDAD ESPIRITUAL Y MATERIAL

Los Celtas eran una antigua civilización europea que alcanzó su esplendor en la Era del Hierro, 50 años antes del nacimiento de Cristo. Muchos pueblos pertenecían a la cultura Celta, de la que se dice eran guerreros, pero también sabios que amaban la música, la poesía y la filosofía; siendo también dueños de una espiritualidad profunda que bendecía al amor, la naturaleza, la amistad, la salud, etc. Es por eso que encontramos diversas bendiciones y oraciones celtas, que siempre buscan la protección de Dios, de San Patricio, de los ángeles y de la naturaleza.
La siguiente Oración Celta, aunque es de autor desconocido, posee una belleza y espiritualidad singular que atrae la buena vibra y armonía según muchos testimonios que encontramos en la web. En Salud Natural TeVe  la hemos actualizado para que la puedas leer, escuchar y repetir si así lo deseas utilizando los principios de las afirmaciones positivas para mentalizarte y atraer la buena fortuna a tu vida, armonizar tu cuerpo y propiciar  la buena salud.
PODEROSA ORACIÓN CELTA PARA LA FELICIDAD Y LA PROSPERIDAD ESPIRITUAL Y MATERIAL 
Que el camino salga a mi encuentro
Que el viento siempre esté detrás de mí y la lluvia caiga suave sobre mis campos.
Y hasta que nos volvamos a encontrar, que Dios me sostenga suavemente en la palma de su mano.

Que viva por el tiempo que yo quiera, y que siempre quiera vivir plenamente.
Recordaré  siempre olvidar las cosas que me entristecieron, pero nunca olvidaré recordar aquellas que me alegraron.

Recordaré siempre olvidar a los amigos que me resultaron falsos, pero nunca olvidaré recordar a aquellos que permanecieron fieles. Recordaré siempre olvidar  los problemas que ya pasaron, pero nunca olvidaré recordar  las bendiciones de cada día.

Que el día más triste de mi futuro  no sea peor que el día más triste de mi pasado. Que nunca caiga el techo encima de mí y que los amigos reunidos debajo de él nunca se vayan.

Que siempre tenga palabras cálidas en un anochecer frío, una Luna llena en una noche oscura, y que el camino siempre se abra a mi puerta. Que viva cien años con un año extra para arrepentirme.

Que el Señor me guarde en su mano y no apriete mucho su puño. Que mis vecinos me respeten, los problemas me abandonen, los ángeles me protejan, y el cielo me acoja.

Y que la fortuna de la naturaleza me abrace. Que las bendiciones de San Patricio y de todos los Santos me contemplen. Que mis bolsillos estén llenos de abundancia y mi corazón ligero.


Que la buena suerte me persiga, y que cada día y cada noche tenga muros contra el viento, un techo para la lluvia, bebidas junto al fuego, risas que consuelen a aquellos a quienes amo, y que se colme mi corazón con todo lo que deseo.

Que Dios esté conmigo y me bendiga, que vea a los hijos de mis hijos, que el infortunio me sea breve, y me deje rico o rica en bendiciones. Que sólo conozca la felicidad.

Desde este día en adelante, que Dios me conceda muchos años de vida y que los ángeles me protejan
¡Así sea cada año y para siempre!