¿Podría una sauna al día mantener alzheimer lejos?

Tomar una sauna todos los días puede ser algo más que refrescante y vigorizante. Es probable que también reduzca el riesgo de la enfermedad de Alzheimer y otras formas de demencia.

Tomar una sauna es bueno para tu cerebro. Los beneficios de la sauna no se limitan a la sensación de hormigueo que obtiene todo cuando se enfríe después de un largo vapor o sauna de infrarrojos. La sauna puede incluso reducir su riesgo de desarrollar la enfermedad de Alzheimer.

¿Cuál es la evidencia científica de la sauna para prevenir el Alzheimer?

Finlandia ha estado estudiando las causas de la enfermedad cardiovascular en su gente en el estudio de la enfermedad cardíaca isquémica de Kuopio (KIHD) por más de 30 años. Los científicos finlandeses han estudiado cientos de vínculos entre el estilo de vida y la salud vascular. Dado que la sauna es enormemente popular en Finlandia, el estudio KIHD siguió los vínculos entre la frecuencia de tomar una sauna y la demencia vascular.

El KIHD rastreó los datos de 2.315 hombres de 42 a 60 años que se consideraron saludables al inicio del estudio a mediados y finales de los años 80. Los hombres se dividieron en tres grupos, los que tomaron un baño de sauna de cuatro a siete veces por semana, los que tomaron una sauna dos o tres veces a la semana y los que tomaron una sauna "sólo" una vez a la semana. (No hay datos para los hombres que nunca tomaron una sauna.) Después de 30 años de estudio, los datos muestran que la sauna parece prevenir el deterioro cognitivo en el envejecimiento:

• Los hombres que tomaron una sauna de cuatro a siete veces por semana tuvieron 66 por ciento menos probabilidades de desarrollar demencia vascular y un 65 por ciento menos probabilidades de desarrollar la enfermedad de Alzheimer que los hombres que tomaron una sauna sólo una vez a la semana.
• Los hombres que tomaron una sauna dos o tres veces a la semana tuvieron 22 por ciento menos probabilidades de desarrollar demencia vascular y un 20 por ciento menos probabilidades de desarrollar la enfermedad de Alzheimer que los hombres que tomaron una sauna sólo una vez a la semana.

No fue sólo la demencia y la enfermedad de Alzheimer que se encontraron menos frecuentes en los hombres que tomaron más saunas. El riesgo de aterosclerosis, ataque cardíaco y enfermedad arterial periférica también fue 40 a 50 por ciento menor en los hombres que visitaron sus salas de sauna de cuatro a siete veces por semana.

Tomar una sauna de forma regular era tan útil para la salud cardiovascular como tomar una medicación con estatina o mantener la presión arterial bajo buen control.

En Finlandia, una sauna es más probable que sea una sauna de vapor que una sauna de infrarrojos y la temperatura "promedio" de una sala de sauna es de 79 grados centígrados (174 grados Fahrenheit).

¿Es el menor riesgo de demencia y enfermedad cardiovascular realmente debido a los beneficios de sauna?

Los científicos que analizaron los datos del estudio KIHD observaron que cuanto más hombres usan la sauna, más beneficios de salud disfrutan. A pesar de tener en cuenta la edad al inicio del estudio, el consumo de alcohol, el índice de masa corporal, la presión arterial sistólica, el tabaquismo, la diabetes tipo 2, los ataques cardíacos previos, la frecuencia cardíaca en reposo y el colesterol sérico de lipoproteínas de baja densidad. Sin embargo, eso no significa más allá de cualquier sombra de duda que visitar la sauna trae beneficios para la salud en lugar de personas sanas están más inclinadas a visitar la sauna. Tal vez la relación es realmente al revés.

¿Debe tomar sauna para su salud?

Algunos críticos señalan que los finlandeses que visitan la sauna con más frecuencia son más propensos a tener su propia sala de sauna. Tienen ingresos más altos y compartiendo su sala de sauna tienen mayor estatus social. Estos factores están asociados con una mejor salud general. Además, dado que tomar una sauna aumenta la frecuencia cardíaca a unos 150 latidos por minuto, las personas que tienen problemas vasculares preexistentes tendrán menos probabilidades de tomar saunas. Sin embargo, hay muchas otras buenas razones para tomar saunas aparte de sólo tal vez la prevención de la enfermedad de Alzheimer en 30 años a partir de ahora.

Éstos son sólo algunos:

• Tomar una sauna (o un baño de agua caliente) antes de entrenar evita el dolor muscular. La aplicación de calor húmedo antes de una sesión de ejercicio reduce la tensión muscular, dolor muscular y el tipo de dolor que sólo aparece un día o dos más tarde.
• Sus glándulas sudoríparas producen proteínas que protegen todo el cuerpo contra infecciones, como apolipoproteína D, clusterina, proteína inducible por prolactina y albúmina sérica.
• Sauna infrarroja a baja temperatura (sólo 35 a 50 grados Celsius o aproximadamente 85 a 120 grados Fahrenheit) después de trabajar también ayuda a prevenir el dolor muscular. Las sesiones de sauna por infrarrojos requieren baja humedad para que la radiación infrarroja pueda penetrar más lejos en el músculo.
• Tomar una sauna después de un duro entrenamiento estimula la producción de glóbulos blancos y ayudará a prevenir las infecciones. Cuanto mejor sea su condición física, más estimulará la sauna la producción de glóbulos blancos (dentro de límites saludables).
• Las sesiones repetidas de sauna aumentan la capacidad respiratoria en las personas que tienen alergias.
• La terapia de Waon que usa una sauna infrarroja, es un tratamiento útil para el síndrome de fatiga crónica. La sauna de infrarrojos se utiliza para sesiones más cortas a temperaturas más bajas y baja humedad. Las sesiones de terapia de Waon tienden a aliviar la ansiedad, la depresión y la fatiga, pero no dan al usuario "levantarse e irse". Sólo reducen los síntomas más negativos de la enfermedad.
• Los hombres y mujeres con sobrepeso tienden a perder peso cuando usan una sauna de vapor, pero esto no es algo bueno cuando el peso perdido se debe a la deshidratación. Las personas más pesadas son más susceptibles a la deshidratación a altas temperaturas. Incluso si contrarresta su pérdida de peso, deben beber agua antes y después e incluso durante la sauna para evitar la deshidratación.
• Tomar una sauna antes del trabajo, si se puede programar, tiende a aumentar su eficiencia durante su día de trabajo.
• La criostimulación del cuerpo entero, que puede ser algo tan simple como tomar la inmersión tradicional en un lago helado después de sentarse en la sala de vapor, aumenta la producción del cuerpo de superóxido dismutasa, el antioxidante primario que mantiene intacto el ADN y las enzimas en presencia de radicales libres.

El baño de sauna es bien tolerado por personas de todas las edades, desde la infancia hasta la vejez avanzada. Incluso las mujeres embarazadas suelen disfrutar de una sauna. Algunos médicos aconsejan a sus pacientes que ya tienen enfermedad cardiovascular evitar la sauna, pero la mayoría de los incidentes graves implican una combinación de beber y tomar una sauna. La terapia de Waon, tomar una sauna de menor temperatura más a menudo, puede incluso mejorar la función circulatoria en las personas que han tenido ataques cardíacos. Incluso las personas que tienen insuficiencia cardíaca congestiva a menudo se benefician de sesiones de sauna. Como regla general, si puedes entrar en la sala de sauna, puedes caminar fuera de ella.