[Esta entrada puedes leerla con acompañamiento musical seleccionando la pista "Estaciones- Yiruma" en el reproductor del lateral derecho]
Aquí van unas pequeñas poesías sobre las estaciones del año. Las escribí en mi más tierna juventud, cuando me atrevía sin conocer y conocía atreviéndome... atreviéndome demasiado, diría yo, porque este género literario me impone fantásticamente.
Mi estación preferida siempre ha sido el otoño, ¿y la tuya?
Primavera
¡Oh, prados pintorescos!,Floridos de nuevo estáis.Las alas de la luzse baten una vez más y cantan a la vidaregañando noche y díacolor y alegría.
Verano
¡Oh, prados espigados!,Remansos escondidos.El sol, sobre vosotros,sus rayos ha vertido.Pronto emerge la quietud,la calma llega con la luna,el campo, en su resurgir,madura su verdura.“Tu tiempo ha pasado,ha de volver a amanecer”.¡Oh, prados espigados!
¡El otoño debe aparecer!
Otoño
¡Oh, prados atigrados!,que con los ojos inundados de placer,miráis a la lejanía,para saber si algún díapodréis volver a florecer.
Invierno ¡Oh, blanco prados,Apacibles y calladosque quedáis contemplando helados,la danza que el viento y la nieve os van tocando, yvuestros arbustos, ya desnudos,esperan al amanecer,para vestirse con los colores
que la primavera escoge y regala después.