Sangre de mis venas,
¿dime que te pasa?
te veo muy enferma
y mi candil, se apaga.
Tengo miedo a perderte
y no ver el agua clara,
quisiera recuperarte
y ver el sol, cada mañana.
¡Luna! dile a las estrellas
que si ven, mi alma gemela
que le diga que yo la espero,
para curar mi leucemia.
Yo le daré las gracias
por darme su médula ósea,
por no sentir indiferencia
y ser conmigo tan generosa.
Por alumbrar mi camino
y embellecer mis rosas,
por hacer que mi destino
no tenga, olor a sombra.
Por hacerse donante
de una joya tan valiosa,
le diré que su diamante
hizo mi vida, mas hermosa.
CON CARIÑO A LOS DONANTES DE MÉDULA ÓSEA
ANTONIA NAVARRETE LEBRATO FEBRERO 2012.
Ana Hidalgo