Revista Religión
Por la feMoisés, hecho ya grande, rehusó llamarse hijo de la hija de Faraón, escogiendoantes ser maltratado con el pueblo de Dios, que gozar de los deleitestemporales del pecado. Hebreos 11:24,25.
Todos, en algún momento de la vida, tenemosque escoger a quién servir. El resultado de esa decisión será gozo o desgraciaeternos.
El enemigode Dios promete gozo, y miles van detrás de él. El gozo de este mundo comprendeplacer, poder, dinero, fama, en fin. Pero, todo eso es temporal y pasajero; alfin, encuentras la muerte. Y el enemigo no te habla de eso.
Si, por elcontrario, decides seguir a Jesús, puedes sufrir en esta tierra. No afirmo quevas a sufrir; digo puedes sufrir, porque vives en un mundo de dolor. Solo queel sufrimiento es pasajero; finalmente, encontrarás el gozo eterno en Jesús.
Nota ladiferencia: gozo pasajero en este mundo y muerte eterna al final, o sufrimientopasajero en este mundo y al fin, el gozo eterno con Jesús.
El poder,el dinero, el placer y la fama no son malos en sí. El placer, por ejemplo, esfruto de los sentidos, y los sentidos fueron colocados, en tu cuerpo, por Dios.No hay nada de malo en sentir placer: el problema aparece cuando empiezas avivir solo en función de ello. Eso sucede con el ser humano de nuestros días.Busca desesperadamente el placer, y no se satisface con nada. Entonces, entraen el terreno sombrío de las depravaciones y las aberraciones de conducta. Esun hombre vacío. No tiene a Jesús en el corazón, y un corazón sin Cristo serásiempre insatisfecho y pensará que el gozo se limita a la satisfacción de lossentidos.
Pero,cuando el hombre se deja encontrar por Jesús, todo cambia: continúa sintiendoplacer, pero el placer no es el motivo de su vida; la razón de su existencia esJesús, y el resultado de eso es el gozo en este mundo, a pesar de lastribulaciones, y el gozo eterno cuando Jesús vuelva.
Entrégate aJesús. Acéptalo como el Señor de tu vida. Vive con él la más linda experienciade amor. Y recuerda que “por la fe Moisés, hecho ya grande, rehusó llamarsehijo de la hija de Faraón, escogiendo antes ser maltratado con el pueblo deDios, que gozar de los deleites temporales del pecado”.
Tomado de meditaciones matinales para adultosPlenitud enCristoPorAlejandro Bullón