¿Por qué detenerse a visitar los alrededores de Trat?

Trat es mejor conocido como el punto de embarque a las islas de Ko Chang y Ko Mak . Pocas personas en general se toman el tiempo para detenerse y visitar la región, fuera de las islas. Sin embargo, Trat tiene algunas atracciones únicas que te sugiero que descubras en el artículo de hoy.

Todavía era temprano en el día y en lugar de volver directamente a Bangkok, pensamos que podíamos aprovechar la oportunidad para visitar rápidamente los alrededores.

Historia de la corta guerra franco-siamesa

Muchos no lo saben, pero entre octubre de 1940 y mayo de 1941, cuando el mundo estaba siendo destrozado, hubo una breve guerra entre Francia y Tailandia (entonces el Reino de Siam).

Una hazaña conocida en la región es la Batalla de Ko Chang. Desde el punto de vista francés, la batalla de Ko Chang es la única batalla naval librada y ganada durante las dos guerras mundiales por una fuerza naval francesa, con planos y medios exclusivamente franceses.

Concretamente, el ejército francés, entonces en Indochina, quería lanzar una ofensiva contra la marina tailandesa, mientras atacaba de su lado en las tierras de Laos y Camboya (aprovechando la desestabilización del gobierno de Vichy en Europa, para recuperar tierras que antes habían pertenecido a Siam), y que Francia estaba luchando por hacer retroceder.

La batalla en cuestión terminó con un alto costo para el lado tailandés, según la versión oficial tailandesa, 36 de ellos murieron, otras fuentes hablan de entre 300 y 500 hombres involucrados en la batalla con sólo 82 sobrevivientes.... Mientras que la flota francesa pudo regresar a salvo y sin bajas.

Obviamente, desde el punto de vista tailandés, se cuenta que los valientes soldados hicieron la retirada francesa... Propaganda a quién se la dices... Pero es difícil decir con certeza quién tiene razón o no en esta historia.

Manglares y la playa de arena negra

Como mencioné sobre las rocas vistas en Ko Mak, la región es volcánica. El resultado es visible en esta playa de arena negra, típica de una playa volcánica.

Poco después de regresar a la carretera por la que llegamos a la zona, vimos estos carteles indicando esta playa. Intrigados, decidimos dar un paseo.

Luego pasamos por un pequeño camino estrecho (no fácil de encontrar pero indicado por un arco escrito en tailandés, a la entrada de dicho camino), bordeado por el pantano de manglares, muy presente a lo largo de esta costa. Nos íbamos a casar en un aparcamiento, junto a un pequeño edificio de recepción.

La zona está en construcción, pero ya hay una pasarela de madera que permite caminar a través del manglar hasta el mar. Es gratis, así que no te prives. Al menos, nos da algo de sombra en este día caluroso, sobre todo en la última parte, más vieja con manglares más gruesos.

Caminamos 500 m. Pero no hay playa ya que llegamos directamente al mar, bordeado por manglares hasta donde alcanza la vista. Sin embargo, hay señales que indican "Masaje de pies" con una pequeña escalera que lleva a este banco de arena, de color negro.

Y cuando pisas esta arena negra, entiendes por qué, ¡es muy agradable! Esta es de una delicadeza nunca antes sentida! En cuanto a la playa en sí, es necesario, a priori, caminar un poco más, pero lo cierto es que es especialmente visible durante las mareas bajas.

Playas pequeñas y únicas

Utilizado principalmente por la población local. Aquí también, siguiendo una señal que indica una playa, aterrizamos en este pequeño trozo de playa perdida, unas decenas de kilómetros antes del muelle de Laem Ngop.

Tuvimos que pagar por un aparcamiento (20 bahts), aunque no nos quedamos mucho tiempo (tuvimos que conducir de todos modos). Este es el tipo de lugar donde apenas paso desapercibido! Sólo vimos tailandeses, muchos con familia o amigos, aprovechando este hermoso día para hacer un picnic (también beber) y dejar que los niños chapotearan.

Como siempre, también existía la posibilidad de comer en el lugar. También había un reciente hotel ubicado allí. Por supuesto, por falta de tiempo, podríamos haber visto más, especialmente yendo a Trat (a unas docenas de kilómetros de Laem Ngop), pero básicamente, el artículo está precisamente ahí para despertar su curiosidad y animarle a descubrir un poco de la verdadera Tailandia, estos pequeños rincones a menudo yuxtapuestos a lugares conocidos (a menudo lugares de paso) pero a menudo ignorados, en general pero no sólo por falta de tiempo.

Entonces, ¿misión cumplida? ¿Eso te hace querer parar un rato en la zona?