La Tierra y Titán tienen gruesas atmósferas ricas en nitrógeno. Esto se debe a que ambas se formaron a partir de los restos de impactos cometarios, dicen los geólogos planetarios.
Titán, la luna de Saturno, debe haberse formado de una forma completamente distinta a la Tierra, y sin embargo comparten una cosa en común: Una gruesa atmósfera rica en nitrógeno que bulle con compuestos orgánicos.
Hoy, Josep Trigo-Rodríguez de la Universidad Autónoma de Barcelona y Javier Martín-Torres del Centro de Astrobiología de Madrid, ambos en España, señalan que ésta puede ser una pista importante. Su idea es que las características comunes apuntan a un pasado común, lo que indica que las atmósferas de la Tierra y Titán deben haberse formado de formas similares.
A primera vista, esto parece bastante improbable. La idea convencional es que la Tierra se formó en la parte interior del Sistema Solar, a partir de la acreción de planetesimales rocosos. Titán, por su parte, se formó en una melé de bolas de hielo cometarias que orbitaban Saturno en los inicios del Sistema Solar.
Sin embargo, la atmósfera inicial de la Tierra siempre ha desconcertado a los geólogos planetarios. Una teoría es que se formó a partir del gas expulsado por las rocas conforme se unían en la Tierra primigenia. Pero se cree que estas rocas eran relativamente pobres en elementos ligeros, tales como el hidrógeno, carbono y nitrógeno, debido a que habrían sido expulsados preferentemente del disco interno en los inicios del Sistema Solar.
Por lo que es una sorpresa ver una distribución similar de estos elementos en la atmósfera de Titán, que se formó a partir de bolas de hielo mucho más lejos.
Trigo-Rodríguez y Martín-Torres concluyen que la similitud indica que la atmósfera de la Tierra debe haberse formado también a partir de cometas, probablemente durante el Bombardeo Pesado Tardío, un periodo de hace unos 4000 millones de años cuando el Sistema Solar interior sufría una lluvia de hielo y roca.
Esto parece que tiene sentido. Efectivamente, encaja con la conclusión de otra línea de pensamiento: El análisis isotópico de N14 y N15 en la atmósfera de la Tierra.
Y eso indica que parece cada vez más probable que la vida en la Tierra, hecha de polvo de estrellas, haya evolucionado respirando gas de cometas.
Artículo de Referencia: arxiv.org/abs/1102.4198: Clues On The Importance Of Comets In The Origin And Evolution Of The Atmospheres Of Earth And Titan
Artículo traducido y posteado en Ciencia Kanija, el original se publicó en Technology Review.