Como ya hace tiempo os comenté, Lorenzo des del principio del embarazo repetia que preferia un niño en vez de una niña… Sus motivos eran varios: podría jugar a la pelota con él, los niños son más fáciles, no le vestiríamos de rosa… Yo siempre le repetía que si venía niña, seria la pequeña de sus ojos, que para ella solo existiría papá y que él se volvería en el idolo de nuestra hija. Pero mis motivos nunca le llegaron a convencer…
Con el tiempo descubrí cual era el verdadero y enigmatico motivo por el que preferia que no fuera niña… y es que papá ya está celoso de su pequeña antes de que llegue! Tiene tanto miedo de cuando tendrá 14-15 años y empiece a tontear con chicos que no puede con solo pensarlo. ¿Por que tienen esa obsesión los hombres? ¿Por que tiene que pensar ya a lo que le puede pasar con los chicos cuando llegará la peque a la adolescencia?
Muy fácil! Todos los hombres que han sido tan mujeriegos en su juventud creen que todos son de su condición… y como le digo siempre yo, “Si tienes tanto miedo, por algo será!” Como que él se acuerda de sus tiempos en esa edad, tiene miedo de lo que los chicos a esa edad puedan intentar hacer con la piccola de sus ojos! jajajaja
No ha nacido todavía que ya esta preocupado por el día que llegará a casa y nos dirá que tiene novio, o que llega con un chico para estudiar, o que se va a dormir a casa de una amiga… yo soy de pensar que prefiero saber los detalles, tener confianza con ella para que me lo cuente todo pero que no me mienta!! En cambio papá dice que prefiere no saber nada, y que si tiene que mentirle…que lo haga, pero que él no quiere enterarse de si tiene o no novio, o de si hace o no hace. En fin, que no quiere tener que afrontar el momento que su niña deja de ser niña para convertirse en mujer.
El hecho es que después de decirnos que nos llegaba una piccola niña, enseguida se hizo a la idea y aunque sigue pensando que prefiere saber poco, esta encantado con la idea de saber que llega la princesita de sus ojos! Y ya esta más enamorado de ella de lo que se podía imaginar…
Y vosotras, os encontrais en la misma situación con vuestros maridos? ¿Tienen los mismos miedos?