Las vísceras de un animal son la parte más rica en nutrientes, ademas, su precio en muchos casos suele ser muy asequible y aportan la base de los nutrientes en una dieta cruda.
¿Por qué tu perro necesita comer vísceras?
En comparación con los cortes de carne muscular, el contenido en nutrientes de las vísceras es mucho mayor, incluyendo grandes dosis de vitaminas del complejo B, como: B1, B2, B6, ácido fólico y vitamina B12.
Las vísceras también contienen una gran proporción de minerales como fósforo, hierro, cobre, magnesio y yodo, y proporcionan las vitaminas liposolubles importante A, D, E y K. Es importante señalar que los animales criados al aire libre, alimentados con pasto, contienen niveles incluso más altos de estos nutrientes esenciales que sus homólogos alimentados con granos.
Prueba con todas las vísceras, incluyendo los pulmones, los riñones, el páncreas - ¡cualquier organo que puedas conseguir!
Una fuente natural de vitamina D
La vitamina D es una de las vitaminas más importantes (en realidad una prohormona) y regula numerosas funciones en el cuerpo. La deficiencia de vitamina D está relacionada con la debilidad muscular, fracturas, cánceres comunes, enfermedades autoinmunes y enfermedades infecciosas. Es especialmente importante para los que viven en latitudes más altas y reciben menos sol (ya que la exposición al sol es la mejor fuente de vitamina D).
Las vísceras también contienen altas cantidades de ácidos grasos esenciales como el ácido araquidónico, y grasas omega-3, incluyendo EPA y DHA. A pesar de la creencia popular, los aceites de pescado y pescado no son la única fuente de EPA y DHA... las vísceras están repletas de estos nutrientes importantes.
Algunos perros (y humanos) encuentran las vísceras un poco repulsivas al principio. Si a tu perro no le gusta el sabor o la textura de la carne de órganos, puedes mezclar pequeñas cantidades de vísceras en sus comidas todos los días.
¿Qué pasa con el hígado?
Muchos nos preguntamos acerca de la seguridad de hígado, sabemos que el trabajo del hígado es neutralizar las toxinas de las drogas u otras sustancias químicas, por lo que, obviamente, la mejor opción para el hígado es el que procede de animales alimentados con pasto, de forma ecológica, sin antibióticos ni hormonas añadidas. Aunque no debemos dejar que eso nos aleje de hígado: filtra las toxinas, pero no las almacena. La carne muscular, típicamente contiene niveles más altos de toxinas que el hígado.
El hígado también es conocido por ser una de las fuentes más concentradas de vitamina A. La Vitamina A natural trabaja para ayudar en la digestión, mantiene los órganos sexuales / órganos reproductores sanos, y es un poderoso antioxidante.
El hígado es una gran fuente de ácido fólico y vitaminas B, especialmente vitamina B12, que ayuda con la fatiga, la capacidad mental y la salud de los nervios, así como la prevención de la anemia.
El hígado también es una de las mejores fuentes, más aprovechables por el cuerpo, de hierro. El hierro es necesario para muchas funciones del cuerpo, incluyendo la formación de la hemoglobina, el desarrollo del cerebro y su función, la regulación de la temperatura corporal, la actividad muscular y el metabolismo de las catecolaminas, por nombrar sólo algunos. La falta de hierro tendrá un efecto directo sobre el sistema inmune; disminuye el número de células-T (linfocitos) y la producción de anticuerpos.
El hierro es esencial para la oxigenación de las células de la sangre. La función primaria del hierro es el transporte de oxígeno y la respiración celular. Para una persona anémica, la fatiga es uno de los síntomas más notables. El hierro contenido en el hígado es una de las fuentes más fácilmente absorbibles y utilizables.
¿Tienes un perro de competición? El hígado contiene un factor anti-fatiga, que mejora la capacidad de transporte de oxígeno de las células de la sangre; aumenta la resistencia y la fuerza en los atletas de todas las especies.
El hígado contiene muchos compuestos que contienen nitrógeno, que son los bloques de construcción para el ADN y el ARN. Combinado con las vitaminas del grupo B, hace que sea muy útil para las personas con Alzheimer u otros tipos de demencia. Los perros pueden sufrir de demencia, así que mejor ser generosos con el hígado.
Mientras que el hígado es altamente nutritivo, sus preciosos nutrientes son muy sensibles al calor, por lo que es mejor que no se cocine o las enzimas digestivas y los nutrientes se perderán.
Añadir hígado en la dieta regular de tu perro, por lo menos una vez a la semana si es posible, para obtener el máximo beneficio de sus altos niveles de nutrientes. Pero sin exagerar - si añades hasta el 5% de la dieta del perro, lo estas haciendo bien.
No olvidemos el corazón
El corazón de res es bastante similar a la carne, aunque es un músculo más denso y pesado y ademas contiene más proteínas y nutrientes únicos.
El corazón es una fuente muy concentrada de la supernutriente Coenzima Q10 (CoQ10), que es necesaria para el funcionamiento básico de las células, así como para optimizar el ritmo del corazón. Los niveles de CoQ10 tienden a disminuir con la edad y son menores en algunos pacientes con algunas enfermedades crónicas, como enfermedades del corazón, cáncer, diabetes y trastornos del sistema inmune.
El corazón de res también contiene selenio, fósforo y zinc, junto con los aminoácidos esenciales que ayudan a construir músculo, almacenar energía y aumentar la resistencia. El corazón también contiene el doble de colágeno y elastina que otros tipos de carne, que es importante para la salud de las articulaciones.
Si estas suministrando una dieta cruda, intenta dar la mayor variedad de vísceras sin abusar de ninguna.
Un poco de anatomía resulta de gran ayuda para quienes suministran una dieta cruda - busca una foto de un pollo o vaca, de su anatomía, y ten en cuenta el tamaño de los órganos en comparación con el tamaño del perro. Esto debe darte una idea de la cantidad de cada órgano que tu perro debe recibir en su dieta. En general, las carnes de órganos (no incluyendo el corazón) deben constituir alrededor del 15% de la dieta total del perro.
artículo original Why Organ Meat Is Important For The Raw Fed Dog