Tomar el sol no es malo, es necesario para el correcto funcionamiento de nuestro organismo, pero no debes abusar de la exposición al sol y tomar medidas de precaución para evitar problemas en tu piel.
PORQUE EL SOL ES BUENO
- Activa las defensas del organismo. Los rayos de sol estimulan la producción de vitamina D, lo que influye en la función de los linfocitos T que necesitan una buena concentración de esta vitamina para cumplir su función. Los linfocitos T son un tipo de glóbulos blancos que nos defiende de infecciones. La Vitamina D actúa de alarma para que los linfocitos T se activen frente a una infección. Podrás comprobar que tras un verano de sol y playa sufrirás menos resfriados en invierno.
- El sol fortalece tus huesos y disminuye los riesgos de osteoporosis. Esto se demuestra facilmente porqué en os paises con pocas horas de sol la incidencia de osteoporosis es mayor. Los rayos de sol hacen que se aumente la fabricación de vitamina D a partir de su precursor que es el 7-de-hidrocolesterol. Esta vitamina es esencial para que el calcio se absorba en el intestino y no se pierda por la orina. Pero hay que saber que con sólo 15 minutos de sol 3 o 4 veces por semana ya es suficiente para cargarte de vitamina D, por lo que no es necesario abusar de sol.
- El sol ayuda a controlar problemas de piel como la psoriasis, lesiones escamosas e inflamaciones. Los rayos de sol evitan que el sistema inmune ataque indiscriminadamente a las células sanas, que es lo que ocurre en la psoriasis. Por ello las personas con psoriasis mejorar mucho durante el verano. También el sol es beneficioso en casos de acné, ya que ayuda a eliminar las impurezas de la piel.
- Disminuye el colesterol malo y evita que se acumule en las arterias, ya que los rayos ultravioletas son necesarios para metabolizar el colesterol.
- La vitamina D reduce el riesgo de padecer cancer de pulmón o mama. Muchos estudios científicos verifican esta propiedad.
- Normaliza la tensión arterial, sobre todo en las mujeres. Esto se debe a que la vitamina D reduce los niveles de la hormona paratiroidea, que es la encargada de regular la tensión arterial, por eso cuando se toma el sol baja la tensión.
- El sol te alegra y te sube el ánimo. Muchos estudios verifican que tomar el sol mejora el estado de ánimo. Al tomar el sol aumenta los niveles de serotonina, que es un neurotransmisor relacionado con la sensación de bienestar.
- El sol activa durante el día y te hace descansar de noche. Con los rayos de sol disminuyen los niveles de melatonina (hormona que favorece el sueño) en nuestro cuerpo y hace que estemos más activos, aunque a veces la sensación no sea esa debido a la bajada de la tensión arterial. Por la noche aumentan los niveles de melatonina, lo que ayuda a relajarte y a dormir mejor.