¿Qué hay más trillado hoy día que un videojuego de tiros? Posiblemente el género de superhéroes o el argumento del cine erótico, la verdad. Pero los shooters, los juegos en primera persona donde vamos limpiando distintas pantallas a tiro limpio, son una constante del medio desde que éste existe. Hay tantos ejemplos que la verdad, cuesta conseguir que uno de ellos destaque por encima del resto, de ahí que “Portal” se convirtiera en uno de los videojuegos más originales, sorprendentes, divertidos y adictivos nada más salir al mercado. Y es que innovó en un terreno saturado por el género de acción trasladando la esencia del juego y la mirada en primera persona para acercarlo al género de puzzles en una aventura que ya, la semana de la salida de su segunda parte, se ha convertido en una pieza de culto.
Tráiler de “Portal”
“Portal” vio la luz por primera vez como un anexo del Half Life 2, un ejemplo típico de los juegos de acción en primera persona. Su corta duración (unas 3 horas), lo convirtió más en una curiosidad que otra cosa, aunque seguía el esquema original del Half Life. La trama era sencilla: una chica encerrada en un laboratorio donde una inteligencia artificial le va proponiendo puzzles y pruebas que pasar. De una cámara a la siguiente, en un juego muy inocente y en apariencia inofensivo que, como recompensa, tendrá una tarta al final. La gracia del juego residía en que no tenía armas, simplemente un aparato de aspecto muy similar a una de ellas pero que había sido desarrollado en el laboratorio y que podía crear portales espaciales entre dos puntos. Por ejemplo, disparar a la pared de al lado y luego al techo creando así un túnel instantáneo entre esos dos puntos, lo que te ayudaría a abrirte paso por las pruebas.
Sin enemigos (o casi), completamente sola y acompañada de una inteligencia artificial con bastante mala leche, pronto descubrías que no todo era tan inofensivo como parecía al principio, y entre las pintadas que antiguos sujetos de prueba han ido dejando en las paredes, nos enteramos de que “la tarta es mentira”. A partir de entonces tendremos que luchar para no morir en las pruebas que nos propongan mientras buscamos una forma de acabar con la inteligencia artificial. La idea de los portales se hizo muy famosa, y la expresión “la tarta es mentira” (the cake is a lie) se ha convertido también en un icono de culto entre los jugones. Sobre todo, tuvo mucho éxito gracias al perverso humor negro que destila el juego, de ahí que “Portal 2″ se convirtiese en una de las propuestas más esperadas del último año.
Tráiler “Portal 2″
“Portal 2″ vuelve a ponernos en al piel de la chica del primer juego, encerrada de nuevo en las cámaras de prueba y sometida a una larguísima hibernación. Tras una serie de acontecimientos que supondrán el despertar de la vieja Inteligencia Artificial, deberemos no sólo huir, sino más tarde aliarnos con ella para acabar con un enemigo común. El juego explota las posibilidades de la entrega anterior y cuenta con un aspecto visual impecable. Además, conserva ese humor tan característico, y eso puede notarse en la exhaustiva campaña de publicidad que se ha creado en internet. Aquí tenemos unos vídeos acerca de los elementos básicos del juego, como los robots, las torretas de vigilancia, los paneles o las botas amortiguadoras.
Paneles
Robots
Torretas
Botas
La verdad es que sólo por ir haciendo las pruebas escuchando las explicaciones que Cave Johnson, fundador de Apperture Science nos va dando, merece la pena disfrutar de un juego entretenido y que te engancha. Además está perfectamente doblado al castellano, así que si queréis entreteneros, sea cual sea vuestra edad o gustos (los videojuegos de tiros no suelen enganchar a todo el mundo) disfrutad de este sabiendo que no hay disparos, sólo puzzles entretenidos, mala leche y chistes muy muy malos.
Y quién sabe, a lo mejor hay tarta.