La vida se volverá una mierda cuando sea adulto y el debe prepararse para eso y yo, lamentablemente, debo ayudarlo: soy el único que puede con él.
El hermanito del gordito mentiroso
Mi sobrino sabe mentir. Tiene 12 años y su primer recurso para huir es decir una mentira. Que catástrofe. Esto de ser tutor me está cagando. No comprendo como él es tan diferente a mi yo de 12 años. Yo a los 12 lloraba tras admitir que habia sacado B en matemáticas. Mi vieja me miraba y ya sabia lo que me pasaba. No sabia mentir, no sabía disimular que algo andaba mal. Pero mi sobrino si. El disimula todo y es un convenido. La otra vez fuimos a comprar con mis abuelos y yo lo comencé analizar. Se hace el inocente, se hace el que le falta todo. Se aprovecha de ellos. Esta bien, esta bien. Es un chibolo, pero dios, pedir que te compren una coca cola esta normal, pero luego pedir que te compren varios pringles cuando ni siquiera tienes hambre, es de convenidos. Y mis abuelos lo complacen: lo aman demasiado. No comprendo. Nunca lo haré. Yo soy el único que lo lee, que sabe como es ese gordito mentiroso. A mi no me persuade. A mi no me engaña. Sé que en parte, es chevere ese weón, porque ve series que yo veía: Supernatural, Smallville, etc. Le gusta la música que a mi me gusta y le gusta Marvel y DC, pero si le sacas esas características es solo otro gordito mentiroso medio hindu inflado de chatarra. Hoy ha escondido su libro de matemáticas, porque tenía varias notas de color rojo. Piensa que lo voy a castigar o algo como su mamá lo hace, pero yo no soy su mamá. No lo voy a a castigar. Yo quiero que sea consciente de lo que hace, yo quiero que aprenda, yo quiero que cambie y que, sobre todo, quiera cambiar. La vida se volverá una mierda cuando sea adulto y el debe prepararse para eso y yo, lamentablemente, debo ayudarlo: soy el único que puede con él. Tengo poder, pero no quería tenerlo. No sé como hacer esto. Nadie me enseño a cuidar a alguien. No tengo hermanos pequeños. Siempre me he valido por mi mismo, pero ahora si quiera debo pensar en que alguien aprende de mi, pero espera: ¿Qué chucha vas aprender de mi gordito mentiroso? Existe el internet, existe Siri. Pero bueno, talvez él solo necesita a un humano con quien conversar, con quien compartir, con quien ser real. Y yo, bueno, necesito, lamentablemente, a un humano con quien dejar de ser un total solitario.