Muchas veces al escuchar la palabra "quinoa" automáticamente la ubicamos como un antónimo de "chorizo" y que es algo que nunca vamos a ver juntos en un mismo plato. ¿Verdad? Sin embargo, este potaje de garbanzos con chorizo y quinoa viene a demostrar que no solo pueden estar juntos en el mismo plato, sino que además ¡se llevan súper bien!
La idea para esta receta la vi por primera vez en el blog de Vanessa Divertido y Delicioso, aunque yo la he cambiado un poco añadiendo verduras y cambiando el lomo sajonia por bacon ahumado. Pero os recomiendo que echéis un vistazo también a su versión, ¡tiene una pinta deliciosa!
El ingredientes elegido este mes para el reto Color y Sabor de Temporada son precisamente los garbanzos. Ya hacía tiempo que tenía la receta de Vanessa en marcadores, por lo que me he decidido a preparar mi versión para este reto.
Y si estás buscando una receta de garbanzos con chorizo más fresquita, te recomiendo que eches un vistazo a estos garbanzos con chorizo, tomates cherry y albahaca super sencillos de preparar y deliciosos.
Ingredientes: (2 personas)
Elaboración del potaje de garbanzos con chorizo y quinoa
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Cómo cocer garbanzos secos
Podemos utilizar garbanzos ya cocidos de bote. Pero si os decantáis por usar garbanzos secos, hay que tener en cuenta que hay que dejarlos en remojo al menos 12 horas fuera del frigorífico, con una cucharada de sal. Conforme pase el tiempo los garbanzos irán aumentando de tamaño. Si vemos que han absorbido mucha agua, podemos cambiarla y dejarlos de nuevo totalmente cubiertos.
Una vez pasadas las 12 horas, toca ponerlos a cocer. En primer lugar los enjuagamos bien bajo el agua del grifo.
En una olla con agua y una cucharadita de sal, ponemos agua que sobrepase los garbanzos unos 3 cm.
Una vez que rompa a hervir, dejamos cocinar a fuego fuerte unos 15 minutos. Vamos quitando la espuma que sueltan con una rasera. Tapamos la olla, bajamos el fuego y dejamos cocer unas 2 horas.
Una vez tiernos los garbanzos los podemos guardar en botes conservados en un poco de agua de cocción y usarlos cuando los necesitemos. -
Ya tenemos nuestros garbanzos cocidos y es el momento de preparar nuestro potaje de garbanzos con chorizo y quinoa. En primer lugar, enjuagamos bien la quinoa bajo el grifo para eliminar la saponina.
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A continuación, la ponemos a cocer la quinoa con el doble de agua que de volumen de quinoa. Dejamos cocer 15 minutos hasta que el agua se haya absorbido por completo. Reservamos.
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Es el momento de arreglar y trocear las verduras. Podemos cortar el pimiento verde en tiras, la zanahoria en rodajas y los ajos en tres.
En una olla con dos cucharadas de aceite de oliva, salteamos las verduras durante 3 o 4 minutos removiendo de vez en cuando. Pasado este tiempo, incorporamos también el bacon cortado en trocitos y las 6 rodajas de chorizo. Cocinamos un par de minutos más. -
Incorporamos ahora los garbanzos cocidos a la olla y añadimos una cucharada de nuestro caldo concentrado de verduras casero. En su defecto, podemos utilizar una pastilla de caldo industrial, o simplemente sal. Pero os recomiendo que probéis a realizar vuestro propio caldo concentrado de verduras, porque el sabor es diferente cada vez, reutilizas restos de verduras, y tiene mucha menos concentración de sal.
Removemos para mezclar todo bien y cubrimos el guiso con agua. Dejamos cocinar unos 20 minutos aproximadamente, o hasta que las verduras estén tiernas. -
Pasado este tiempo, es el momento de incorporar la quinoa a la olla.
Removemos bien para mezclar todo el guiso y dejamos cocinar unos 5 minutos más.
¡Y ya tenemos listo nuestro potaje de garbanzos con chorizo y quinoa!
Una receta original para darle un toque diferente al tradicional plato de cuchara de garbanzos y chorizo. ¡Seguro que no deja a nadie indiferente!
Espero que os animéis a probarla y me contéis que os ha parecido en los comentarios. ¿Conocéis más platos que unan la quinoa y el chorizo? ¡Contadme!