Presentación Semana Santa de Cieza

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De Cieza, su gente, sus amigos y en especial de su Semana Santa, Fiesta de Interés Turístico  Nacional, me hablaba siempre mi abuela Mamamina. Ella nació en 1913 en esta tierra de sol, paz y fruta. Junto al río Segura. Un año antes de que se fundara la Junta De Hermandades Pasionarias que ahora me convida, precisamente en su 100 aniversario.

Como os contaba en el post anterior, la última vez que visité Cieza fue desde el cielo, con mi tío Guillermo, meses antes de que perdiera la vida. Mi segundo padre me llevaba a sobrevolar la casa donde nació mi abuela. En octubre un trágico acciedente en ese mismo autogiro en el que yo volaba a menudo junto a él, perdió la vida, pero no su presencia siempre conmigo.

Hace unos meses fui convidada por parte de la Junta de Hermandades Pasionarias para presentar como nieta de esta tierra su querida Semana Santa. Desde niña se lo importante que la Semana Santa es para todos los ciezanos, por eso la invitación me causó un profundo honor, respeto y mucha emoción.

Fue un fin de semana inolvidable, junto a familia, nuevos amigos y viejos amigos que nos acompañaron desde Madrid. Pudimos disfrutar del clima, de las calles empedradas de la ciudad, y visitar los 43 pasos ya preparados esperando a la que sin duda es la Semana más importante de Cieza.

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Hoy os dejo parte de mi presentación, cargada de sonrisas y lágrimas

“Hay noches y noches y hoy es una de las muy especiales. En mi memoria vuelan recuerdos y un nombre propio. Guillermina Payá. Mi abuela Mamamina. Ella es mi raíz en Cieza, es mi raíz en la Semana Santa. Mina, como era conocida por sus amigos, nació en el Menjú y fue Bautizada en la Parroquia de San Joaquín, seguramente por ser hija de D. Joaquín Payá que unos años antes, a principios del siglo XX, cuando se comenzaba a electrificar España, compró el salto de agua del Menjú. Mamamina siempre recordaba con especial cariño sus primeros años de vida aquí. Ya que sus padres hicieron del Menjú su vivienda habitual. Hablaba de la barca que cruzaba de un lado a otro el Menjú y a la que su padre bautizó con el nombre de su hija pequeña,  Guillermina. Nos contaba también simpáticas historias como la que aconteció cuando un amigo de la familia, Julián Pérez Cano le ofreció como regalo sus deliciosas olivas. Alguien fue a recogerlas de su parte pero se confundió de casa y las pidió donde otro buen amigo, Antonio Pérez, quien aún sorprendido, no dudó en enviar a Mina una garrafa llena de olivas. Días después todos se bañaban en el río y Mina, agradeció a Julián sus olivas. Fue entonces cuando se descubrió el error, al saltar Antonio para reclamar la gratitud. Siempre hablaba de sus amigos, de sus raíces, de la Semana Santa que vivió en su infancia y juventud, repartida entre las Cofradías del Cristo Yacente y de San Juan.
Mi abuela fue una de esas ciezanas que un día tuvo que dejar su tierra atrás, pero nunca perdió el respeto y cariño a su pueblo, ni a sus amigos de infancia. Nunca lo olvidó y siempre la tuvo muy presente. Ese amor trató de transmitirlo a mi padre, a mis tíos y a sus nietos. Lo consiguió, por eso estoy hoy  aquí sintiendo una emoción difícil de explicar. Lo cierto es que ella no sólo recordaba a sus amigos sino que hasta su muerte, hace ahora tres años, continuó su amistad con la familia de Julián Pérez Cano, y me alegra saber que su nieto Julián, hoy también está entre nosotros. Amistades de toda la vida que no deben perderse. Recuerdos que han de pasar de padres a hijos.

Me llamo Carla y lo más importante de mí es que me gusta saborear la belleza de la vida y de eso Cieza sabe mucho y su Semana Santa mucho más. Los demás datos de mi persona son adyacentes, circunstanciales e incluso secundarios. Lo importante es lo que vean y perciban esta noche, en la Presentación de Carteles de la Semana de Pasión 2014.

Hace unos meses, en Noviembre me encontraba realizando un viaje de fin de semana   a Pontevedra. Unos minutos antes de comenzar uno de los desfiles de moda, un amigo y paisano vuestro me dice: Este año tienes que volver a tus orígenes. Esta próxima Semana Santa vas a hacer feliz a tus seres queridos  que ya no están. Me quedé sorprendida pero sonreí. Era demasiado misterioso para ser cierto.   Desconocía que alguien se acordará de mí para este acto. Cuando me comunicaron que era para realizar la Presentación de la Semana Santa de Cieza miré al cielo y empezó llover. Quizás esas gotas de lluvia eran la emoción de uno de mis ángeles custodios, de mi abuela Mamamina y vuestra paisana Guillermina Payà. Además, Apenas un mes antes de que me comunicaran que vendría a la presentación de la Semana de la Pasión, alguien muy especial en mi vida, y precisamente la persona con la que había visitado Cieza por última vez, se despedía de nosotros desde el cielo. En el cielo perdió la vida, y desde le cielo poco tiempo antes estuvimos admirando Cieza. Así que cuando vuestro paisano me propuso estar aquí, con vosotros esta noche,   supe que el encuentro de hoy con Cieza sería especial.  Y Aquellas historias que me contaba mi abuela sobre la mayor joya que tiene esta ciudad, La Semana Santa, empezarían a ser vividas en primera persona.

Mi tarea es presentar la Semana Santa y lo que año tras año se ha venido haciendo, sus carteles más representativos. Seis carteles que anuncian la bella tradición ciezana. Tambores, cirios, trompetas, cornetas, flores, túnicas, estandartes. Ya es Semana Santa en Cieza. Seis carteles…y mil estampas más que definen una pasión, la de Cieza”

Luego se conoció el nombre del Nazareno del año, Rafael Salmerón, quien como antiguo presidente de la Junta de Hermandades, tampoco pudo contener la emoción.

Y para terminar se presentaron los carteles de la próxima Semana de Pasión ciezana.

Os convido a esta tierra de luz, a descubrir una de las Semanas Santas más bellas de nuestro país.

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